- Providencia, Chile
- 30, Agosto 2014
- Número: 295526
Engaño para compra de casa
PRESENTE
En octubre del año pasado con mi señora firmamos la promesa de compra de una casa modelo B del condominio Terrazas de Chicureo de Inmobiliaria Aconcagua, previo a esto la vendedora nos ofreció la posibilidad de agrandar la cocina, incluidos muebles, una despensa y cierre de la logia, por 600 Uf adicionales, lo cual fue lo que nos motivó a optar por esa casa de Aconcagua por sobre otras similares de otras inmobiliarias. Cuando fuimos a firmar la promesa de compra se nos explicó que la carta de compromiso para la ampliación de la cocina se firmaría a fines de noviembre y que ahí se pactaría la forma de pago para poder ingresarlo al crédito hipotecario. Paso el tiempo y seguimos esperando y preguntando, en forma prácticamente mensual, cuando firmaríamos dicha carta de compromiso; a lo cual siempre nos respondieron “que no nos preocupáramos, que todos tenían sumamente claro lo de la ampliación de la cocina y que a fin de mes firmaríamos la carta de compromiso, que Aconcagua era una empresa sumamente seria, etc.”, todo esto respaldado por múltiples correos electrónicos. Así fue como nos mantuvieron sin respuesta concreta hasta Julio de este año, donde al volver a preguntar cuando íbamos a firmar el compromiso por la ampliación la respuesta de la encargada de servicio al cliente de inmobiliaria fue la siguiente: “Lamento el mal rato que le hemos ocasionado, y la demora en la respuesta. Esta demora se debe a que la constructora, debía dar la factibilidad de las ampliación. El problema mayor consiste en que la ampliación de la cocina, no es factible para el modelo B .por error les ofrecieron una ampliación al modelo B, promoción considerada para la ampliación del modelo A1 únicamente. En rigor cualquier modelo puede ser intervenido, pero solamente el modelo A1 considera, dado su diseño, la ampliación natural. De realizarse en el modelo B los costos superarían con creces las 600UF y en ningún caso se podrían hacer antes de la recepción municipal, pues modificaría el proyecto informado.” Todo esto después de llevar varios meses pagando el pie de la casa, habiendo dejado de lado la oportunidad de comprar otra casa del sector y con múltiples visitas a Aconcagua donde se nos afirmó que la ampliación se iba a llevar a cabo. Después de mucho pelear e indicarles, que por más que me encantaría que me devolvieran lo que llevo pagado por la casa, no podía ya que todas las casas del sector han subido cerca de un 20% del valor que tenían hace un año cuando firmamos la promesa, por lo tanto me imposibilitaba poder comprar otra casa. Después de mucho alegar e iniciando los tramites para entablar una demanda, accedieron a “respetarnos” la ampliación de la cocina. El problema parecía solucionado a expensas de un mal rato, que como comprador, no tendría por que haber sucedido. sin embargo un par de semanas después me llegó el anexo de la promesa de compra para agregar la ampliación de la cocina: “las partes dejan constancia que dicha ampliación se realizará con posterioridad a la recepción municipal de la unidad, por lo que no estará afecta a las garantías que establece el artículo 18 de la Ley General de Urbanismo y Construcciones”, vale decir, Aconcagua no se responsabiliza por la garantía de la ampliación que ellos nos ofrecieron y que ellos realizarían, y a su vez se realizaría posterior a la recepción municipal. A su vez se nos indicó que la ampliación solo incluiría agrandar la cocina aproximadamente 7 metros cuadrados y nada más de lo otro que se nos había ofrecido en un principio. Por si fuera poco todo eso, se nos indicó que las 600 UF de la ampliación no podrían anexarse al valor de la casa para temas de la escritura, por lo que no podría pagarse en conjunto con el crédito hipotecario. De esta forma lograron deshacerse de la eventual demanda pero en ningún momento solucionaron o mostraron la preocupación de hacerse cargo en forma real del ofrecimiento inicial con el que se nos tentó para comprar la casa. Todo esto agotó toda mi paciencia y quiero dejar constancia de estos hechos acá para que a nadie más le vuelva a ocurrir y no sean engañados por Aconcagua con ofrecimientos de los cuales, luego de que ya tengan firmada la promesa de compra, se lavarán las manos y desconocerán todo lo que les ofrecieron. Aconcagua es una empresa falta de ética, a la que no le importa sus clientes y solo le importa vender sin importarle como lo consiga.
Autor: C.N.