- Lampa, Chile
- 30, Agosto 2014
- Número: 295523
Subus destrozó mi vida
PRESENTE
El día 09 de abril del 2014, aproximadamente a las 13:30 horas, iba conduciendo por Gran Av. José M. Carrera, por la pista del centro, en dirección hacia el norte, y al llegar a la intersección con Gral. Korner (paradero 30), me detuve en un semáforo en amarillo, porque el flujo vehicular era abundante y no quería que la L. roja me pillara en medio de la intersección.Apenas me detuve sentí el impacto de un bus del Transantiago, línea 211, patente ZW5069, que había recogido recién pasajeros en un paradero, y que muy apurado para pasar con la L. amarilla, se cambió a la pista del centro sin percatarse que yo me había detenido. El golpe me lanzó hacia delante y al costado, al otro lado de la calle que no había querido cruzar por precaución. La parte trasera de mi auto estaba destrozada.Aturdida por el golpe, fui asistida por un taxista que me dijo que había llamado a carabineros. Minutos después llegó el conductor del bus, José Zúñiga Soto, quien luego de evacuar a sus pasajeros, me entregó todos sus datos y se deshizo en disculpas. notificó a la empresa SUBUS, y recibió instrucciones de reunirse con el asistente jurídico cuando se desocupara.A los 20 minutos llegaron los carabineros de la Tenencia de la comuna de El Bosque. En ese momento me dolía mucho la cabeza, y la zona lumbar. Sentía que me iba a desmayar del dolor, pero el miedo a quedar tirada en medio de la calle hizo que me mantuviera consciente.Los carabineros pidieron los documentos de rutina, y me preguntaron si estaba lesionada. Dije que sí, a lo que ellos respondieron que entonces era necesario hacer una denuncia e ir a constatar lesiones y realizar alcoholemia.Como estaba realizando funciones de trabajo en terreno, esto correspondía a accidente de trabajo. Llamé a mi empleador, y me dijo que Mutual me podría ir a buscar de inmediato en ambulancia y atenderme. Cuando le expliqué esto a carabineros, ellos me amenazaron con no dejarme ir, y no entregarme mis documentos, porque lo que importaba en ese momento era cumplir con el procedimiento. No les importó mi dolor.tuve que llamar a una grúa que llevó mi auto chocado a la Tenencia. Afortunadamente a la vuelta, está el CESFAM Santa Laura, donde había estado ejerciendo labores de docencia durante la mañana de ese día. Soy profesional de Salud y estaba supervisando alumnos en práctica. Algunos funcionarios fueron a acompañarme, e hicieron las gestiones para poder dejar mi auto guardado en el recinto hasta que pude ir a buscarlo días después.Cuando nos atendieron en la Tenencia, luego de esperar una hora para que los carabineros realizaran su cambio de turno, me dijeron que no me podían llevar antes de las 17 o 18 horas a realizar la alcoholemia, porque antes de esa hora era imposible. Nada me cuadraba, por lo que yo sabía en los SAPU, (que abren a las 17), no realizan alcoholemias, ¿Por qué no me podían llevar al Hospital El P. o al B. Luco que atienden 24 horas?, ¿habrá sido flojera o falta de personal?. En ese momento me puse a llorar, no sé si por el dolor o la impotencia. En eso se acerca un Carabinero muy amable, que me dice: “yo a usted la veo bien. ¿Por qué mejor no hace una constancia, que es lo que necesita para que el seguro de reclamos.cl/empresa/subus">Subus le pague, y llama a la ambulancia de la mutual para que la vengan a buscar?”.Accedí. Y me llevaron a la 39° Comisaría de El Bosque, porque según ellos, no tenían el sistema necesario para hacer las constancias.Fui a hacer la constancia, junto con el conductor. Nos tomaron todos los datos y nuestros relatos eran acordes. (constancia número 2664).Recién a las 17 horas pude llamar a la Ambulancia de la Mutual, quienes me fueron a buscar al CESFAM Santa Laura, y me llevaron al Hospital Mutual de Seguridad de Alameda.Tras Estudios, el diagnóstico fue: esguince cervical y contusión lumbar. Estuve una semana con Licencia, (pagada en su totalidad por Mutual).Durante esa semana comencé a hacer los trámites: Me contacté con SUBUS, me dieron que debía llamar a otro número para ingresar el siniestro, lo hice. Me asignaron el número de siniestro 15354065 y me dijeron que debía esperar que la empresa Penta Security me asignara un liquidador que se contactaría conmigo, o que los llamara nuevamente para que me informaran.Llamé sagradamente durante todo un mes. según ellos cada día ingresaban nuevamente mi requerimiento.Me cansé de llamar, y mi ánimo bajó tanto que empecé a tener problemas para dormir, labilidad emocional, anhedonia, conflictos en y con el trabajo, Etc. Terminé yendo desesperada a un psiquiatra.A mediados de junio volví a llamar. Me informaron que el liquidador ya estaba asignado, y que debía contactarme con Dante Miño.Lo llamé, me pidió que le llevara los documentos a su oficina y además el auto, porque tenía que verlo y hacer un informe de los daños. ni siquiera me preguntó si el auto podía andar… Tuve la impresión de que su trato fue un tanto despectivo, quizás machista, así que le pedí a mi padre que lo llamara. Tenía razón, con mi padre fue muy amable, e incluso fue él mismo a buscar los documentos y a ver el auto a donde lo tenía guardado, en casa de mis abuelos, ya que él vivía relativamente cerca. También le informó a mi padre que era reclamos.cl/empresa/subus">Subus quien debía pagarme por el choque, ya que Penta Security solo pagaba cuando eran montos superiores a 6 millones de pesos. El presupuesto que yo les presenté por la reparación era casi de un millón.A estas alturas, ya me habían dado licencia psiquiátrica, durante 15 días, y luego 15 días más. Isapre C. B. sólo aprobó el pago de la mitad de la primera licencia, y me citaron a peritaje con un psiquiatra. Fui, y afortunadamente mis licencias fueron aprobadas. Estaba con un trastorno adaptativo ansioso, y con estrés post traumático. Hasta el día de hoy no me atrevo a conducir un auto.Cuando ví el pago de la licencia, era bastante menos de lo que yo pensaba, la razón: la semana que estuve sin trabajar a causa del accidente. La Isapre pagó en base a lo que me había pagado mi empleador los últimos tres meses, que me pagó menos porque Mutual pagó el resto del mes de abril.Mi situación emocional y económica se hizo insostenible, fui despedida de mi trabajo y tuve que poner en venta mi departamento.El 21 de Agosto Dante Miño le informa a mi padre que el cheque está listo, y que debo comunicarme con Patrick Weitzel, asesor jurídico de SUBUS.Me indica dos números de teléfono para llamar, los cuales jamás son atendidos… jamás!. Estuve llamando durante días, a toda hora, mandando correos electrónicos y nunca obtuve una respuesta.Llamé nuevamente al liquidador pidiéndole ayuda. Nuevamente me trató de la misma forma despectiva y me dijo que no podía hacer nada porque él ya había cumplido con su trabajo, pero que podía encontrar al señor Weitzel en el terminal reclamos.cl/empresa/subus">Subus de Catemito.A esas alturas ya había googleado a Weitzel y ví que tiene varios reclamos por la misma causa.Acudí el 28 de agosto, y un guardia me dijo que Weitzel iba tres veces por semana, y que al Día siguiente antes de las 13:00 lo podía encontrar. Además me revisó en un listado donde según él, estaban todas las personas que debían ir a buscar un cheque por pago de accidente, y que si mi nombre no estaba ahí tenía que llamar al mismo número que me dio el liquidador… ese que jamás contestan. (El mismo guardia me dijo, riéndose; “si, jamás contestan”)Volví el viernes 29 de agosto, me mostraron el mismo listado, y me dijeron lo mismo. Pedí hablar con Waitzel, y llamaron por radio a la secretaria E. Alcaino, quien al parecer le dijo que me sacaran del lugar. Pedí hablar con la secretaria por radio, el guardia accedió, le expliqué mi situación, y que sólo necesitaba que me dieran una respuesta o que me dijeran qué hacer ahora… y ella, jamás respondió. Incluso el guardia preguntó “¿escuchó señorita Erika?”, y tampoco obtuvimos respuesta.Ese mismo día 29 de agosto recibo un correo de Weitzel, diciéndome que: “la información que me indicada (por el liquidador), no es la correcta, ya que es la empresa (SUBUS) quienes alcanzan los potenciales acuerdos extrajudiciales y no la compañía de seguros”, y que “por disposición de nuestro corporativo, no estamos alcanzando acuerdos extrajudiciales hasta nuevo aviso, por lo que debes canalizar tu siniestro por la vía judicial para reclamar lo que en justicia estimas que te corresponde”.Es una burla que me hayan obligado a esperar y a hacer trámites durante casi cinco meses, en los cuales me quedé sin auto, sin casa y sin trabajo estable… Ahora me obligan a armarme de paciencia para llevar esto a la justicia, requiriendo tiempo y dinero que por causa de ellos, de su mala gestión, su mala voluntad, y sus intereses económicos, ahora simplemente no tengo.SUBUS no sólo Destrozó mi auto, también mi vida.
Autor: M.H.