- Coquimbo, Chile
- 11, Enero 2021
- Número: 756313
Mala atención y servicio decepcionante
PRESENTE
En principio iba a enviar este reclamo únicamente al Banco de Chile, pero revisando el sitio web del mismo no encontré ningún apartado de "sugerencias y reclamos", y solo al buscar en Google pude llegar a un formulario donde hacer tal cosa. Por tanto, sumando esto a la Mala experiencia con la empresa, preferí dejar un registro aquí también, aprovechando que llegué a esta página al buscar "banco de chile reclamos".El asunto es así: el 28 de diciembre de 2020 abrí la muy promocionada cuenta Fan, esperando que fuera mejor opción que la cuenta RUT. El proceso de registro, que se realiza en línea, anduvo bien. Incluso valoré mucho que facilitaran en esa instancia la apertura de la cuenta, al permitir que quien no tuviera "clave única" igualmente pudiera abrirla contestando unas preguntas de seguridad. Como no tengo mi clave única del Registro Civil, tomé esta última opción, la que, eso sí, tenía como condición ir a firmar el contrato personalmente en alguna sucursal antes de que pasara un mes, o cerrarían la cuenta.Al finalizar el trámite en línea, daban la opción de solicitar también la tarjeta física de la cuenta, que estaría disponible para retirarla dentro de los siguientes cinco días hábiles, así que aproveché de pedirla. El 7 de enero me llegó un mensaje de texto a mi teléfono, de parte del banco, en el que me recordaban que debía asistir a firmar el contrato. Quise sacar hora en la página para el día siguiente (viernes), pero ya estaban todas agendadas, así que tuve que hacer fila cerca de media hora antes de poder ingresar a la sucursal, que a todo esto era la sucursal del Banco de Chile de Coquimbo, ubicada en calle Melgarejo 890. Al final fueron algo más de cuarenta minutos los que tuve que esperar hasta ser atendido, nada tan terrible: era lo mismo para todos los que hicimos fila. Lo realmente "penca" fue que, después de un par de vueltas de trompo que se dieron tres trabajadores del banco, me salen con que no estaba la ejecutiva que realizaba el trámite, me dijeron que volviera el día lunes, y que entonces no habría ningún problema.En esa ocasión me atendieron, como dije, tres personas sucesivamente, y creo que es justo que mencione que al menos una de ellas fue realmente empática y cortés, mostrando preocupación por dar un buen servicio.Realmente me mosqueó bastante la situación; no conozco a nadie a quien le de lo mismo que no respeten su tiempo, y esta experiencia contrastaba bastante con lo ágil que fue el trámite automático en línea. "Empezamos mal", pensé. Pero no quise amargarme el resto del día siendo aún temprano, así que decidí volver el lunes.Me aseguré ese mismo día del intento fallido y conseguí sacar hora para el día lunes, 11 de enero, a las nueve.Llegó el lunes. Apenas entrando, un especie de recepcionista me preguntó qué necesitaba, y tras informárselo me indicó que pasara directamente al escritorio de... LA MISMA SEÑORA que la vez anterior no pudo realizar el trámite. La recordaba perfectamente, porque al parecer le encanta vestirse de rojo, y ella se acordaba también de mí: "Ahora sí que se va a poder", me dijo apenas me vio.En fin, que después de unos minutos y un par de miradas que me hicieron sospechar, la señora me dice que no puede hacerlo, sin explicarme nada más, y me indica que debo pasar por el mesón de atención al cliente, que ahí me resolverían el asunto.Saqué número, me tocó el 2. Pero en lo que empezaron a atender a la primera persona pasarían otros diez minutos por lo menos. Cuando al fin llega mi turno, me atendió otra señora, y ahí ya se fue todo al joraca. Sin dar mayores explicaciones, solo me dice que están con problemas, que no puedo firmar el contrato tampoco ese día, ni tampoco retirar la tarjeta sin antes haber firmado el contrato. Le expliqué que ya había pasado lo mismo el viernes anterior, y solo se encogió de hombros. Como de su parte no nació nada más, le pedí hablar con alguien que me pudiera realmente ayudar. Entonces me dijo que podía hablar con un tipo que estaba sentado en un escritorio en la esquina, al costado izquierdo de atención al cliente.Me dirigí a hablar con él, y solo puedo decir "qué persona más pedante y poco profesional". De partida, ni siquiera el saludo, luego pareciera que le molestó que fuera a pedirle una solución. Para sumar, me di cuenta de que ni siquiera conocía bien el producto: se complicó tratando de explicarme algo que ya sabía, para finalmente solo decirme que no se podía, que no estaba funcionando el sistema.Mientras esperaba, me hizo verdadera gracia ver por todos lados pendones publicitarios de la famosa cuenta Fan: detrás de las cajas, por los costados... Y en una pared: "En Banco de Chile cuidamos tu tiempo", o algo así :-) El chiste se cuenta solo.El "trabajador del año" que me atendió al final, me quedé sin saber su nombre. Podría habérselo pedido, para devolverle el favor, pero ya no venía al caso. Me imagino que ya debe de tener lo que se merece: muy poco aprecio.Finalmente decidí dejarlo así. No iré una tercera vez para ver si es que ya solucionaron sus problemas técnicos. Hay más bancos, y cada vez más productos parecidos. Como anécdota final, el 2018 vendí una casa, y fui con el vale vista a la misma sucursal, con la idea de abrir una cuenta (no era cliente entonces tampoco), pues me imaginaba que el Banco de Chile me brindaría mejor servicio que mi banco, pero apenas pasar por atención al cliente me arrepentí. Recibí, de entrada, un trato frío, apático, que me espantó. Tanto que ni siquiera me lo pensé y arranqué de ahí a toda prisa.Sin más, solo espero que le sirva de referencia a quien lea esto.
Objetivo:
Dar a conocer mi experiencia
No espero una solución a estas alturas. Ya decidí sacar mi plata de la cuenta. No seré cliente de un banco que de tan mal servicio.
Autor: I.R.