Mal servicio e irresponsabilidad de ejecutivos de cuenta

El día martes 28 de junio de 2016, no pude usar mi tarjeta de débito en un supermercado ni en cajero automático. Llamé al Banco Itau para preguntar por posibles fallas en el sistema. Para mi sorpresa, después de casi 30 minutos (de mi costo) mi interlocutor me indica que el banco bloqueó mis tarjetas pero que nadie sabe el motivo. Al indicarle que encontraba insólito que no pudieran ser capaces de indicarme el motivo (por último, como medida de prevención por posible clonación), la persona insiste en que no sabe el motivo y que nunca lo van a saber. Como solución me ofrecen esperar "sólo cinco días hábiles" para la re-emisión de una tarjeta nueva. Solicité que el ejecutivo que se me asignó me llamara con una solución más adecuada considerando que mi problema lo originó el mismo banco y no era posible que me hicieran esperar 5 días hábiles, sin embargo ninguno de los requerimientos es llevado acabo. El día miércoles, otro ejecutivo que "contestó el teléfono de su compañero porque él no estaba en su puesto de trabajo" me indica que debido a las molestias ocasionadas me iban a gestionar de forma expres una nueva tarjeta, la que se me entregaría en el día de ayer jueves. Fui desde mi domicilio en Pirque hasta Santiago a buscar la tarjeta y cuando al fin logré hablar por primera vez con mi ejecutivo, este indica que no existe tal tarjeta. Luego de haberle expresado mi molestia y de haberle solicitado que me devolviera el llamado con una solución, él decide mandarme un correo electrónico a las 16:43 indicandome que ellos se iban a contactar conmigo y que "por favor no me anticipara hasta nueva confirmación"!! Hoy viernes 01 de julio, sigo sin haber recibido ninguna información sobre un servicio que estoy pagando y no puedo usar. Y lo más indignante de todo es la poca empatía y profesionalismo de las personas que supuestamente administran los productos contratados con el banco, y que además me esten pidiendo que no siga reclamando por intentar utilizar mi plata y el servicio por el que pago.