- La Florida, Chile
- 24, Junio 2021
- Número: 815291
Posible histerectomía por "error"
PRESENTE
Mi nombre es S. Fariña, escribo esta carta con el objetivo de que lo que contaré a continuación no le vuelva a ocurrir a ninguna mujer que se atienda en vuestra Clínica Bupa Santiago. Y que se tomen las medidas que consideren necesarias para evitarlo.Me considero una persona preocupada de mi salud en general, especificamente mi salud ginecológica, por tanto desde mis 16 años, que fue la primera vez que visite a mi ginecólogo tengo mis controles anuales. En este punto me gustaría comentar que desde esa edad, me he controlado con el Dr. Rogelio González, en la clínica Santa María. Pero en el 2018 me fui a vivir fuera de S. por lo que por cercanía de casa de mi madre, y mi plan de salud, me quedaba mejor tener mis controles en sus dependencias.Es por este motivo que a fines del año 2019, tengo mi primer control en su dependencia, asistiendo a realizarme mi control anual. En esa oportunidad me atiendo con C. Herrera, quien me solicita una serie de exámenes, los de rutina, y muestra un mioma de menor tamaño, el cual me plantea que no hay nada de qué preocuparse y como me controlo anualmente, lo controlaremos en cada visita. Por tanto, me quedé tranquila, además era la primera vez que escuchaba que tenía miomas, nunca me hablaron de que podía estar generando este tipo de fibras en mi útero.Pasa el 2020, y por temas de pandemia no fui a realizar mi control anual.Y en el 2021 surge la noticia de que en las farmacias no venderán anticonceptivos sin receta médica. Es por ello que decido solicitar hora con J. Avilés, así aprovechaba de solicitarle mi receta y realizarme mi control anual. Solicite hora con él, por que con el Dr. H. no me sentí del todo cómoda, así que prefería elegir a otro médico, que por currículum me pareció adecuado para mi. Solicitando hora el viernes 16 abril.De entrada le comento que tengo manchado entre periodos menstruales hace aproximadamente 3 meses, y le comento que en el año 2019 me encontraron unos miomas, por lo que tenía sospecha que algo estaba mal con mi mioma, que hasta ese momento eran dos, por lo que recordaba. Por lo que de inmediato revisa la ecografía transvaginal realizada en ese periodo y me plantea que por la ubicación no debería estar dando ese síntoma, por lo que se inclinaba a que fuera un desorden hormonal, que puede ser generado por mi alimentación, ya que no como carnes rojas. Nuevamente quedé tranquila porque es parte de mi normalidad tener falta de vitamina D, y más en ese periodo porque no me estaba tomando mi suplemento de vitamina. Así que me envía a realizarme una nueva ecografía transvaginal, para revisar mis miomas.Es por esto que solicito hora con el Dr. H. para el martes 20 de abril, a pesar de que no me sentí como con él la primera vez, pero por mis horarios de trabajo no tenía más opción. Y es ese día cuando comienzan mis días de mayor dolor y angustia que nunca había sentido.Llegó a realizarme mi ecografía y le comenté que él me hizo otra ecografía en el 2019, donde me encuentra unos miomas. Por lo que le pide a la asistente que la busque, la cual lo busca y lee antes de comenzar mi examen. Al comenzar el examen lo primero que dice es “esto se ve complicado” a lo que pregunto que es lo que aparece, contestando “estás llena de miomas”, desde mi ignorancia le pregunta qué significa eso, respondiendo “que tendremos que sacarte el útero”. Estas palabras derrumbaron mi vida en menos de 5 segundos, no llevaba ni 5 minutos en el box y ya me había destruido la vida, mi mayor sueño en mi vida era poder gestar, trabajo con mujeres gestantes y toda mi vida la planea y desee ser madre, y el doctor me dice que no tengo posibilidades de serlo, me arrebata lo que más quería y así sin previo aviso, y sin ningún tacto.Por lo tanto, de inmediato me puse a llorar, calculo que estuve aprox. 20 minutos en el box de ecografía, donde después de 10 minutos, en los que sólo lloraba mientras él hacía el examen, me pregunta si tengo hijos, a lo que respondo que no, y ahí me dice bueno las opciones debes verlas con tu ginecólogo. Dándome a entender que había más opciones solo la histerectomía que me había dicho que debíamos hacer.En ese momento sentía que quería salir corriendo, que quería llegar a casa y abrazarme fuerte a mi pareja, que de alguna manera alguien o algo nos dijera que lo que los estaba pasando era mentira, que existía posibilidades de ser padres como siempre lo quisimos, que nuestros planes de gestar prontamente no se habían truncado, pero no fue así.Al salir del baño, después de vestirme, el doctor ya no se encontraba se había ido, solo quedaba la secretaria quien estaba con otra secretaria conversando, y con un tono alegre me dice “tome aquí está el examen, que le vaya bien”, ¿que me vaya bien? Si me destruyeron la vida y sin ningún tacto, me acaban de decir que con mi pareja no podrás ser padres biológicos, a una edad que es muy viable ser.Salgo de la consulta llorando, tiritando y sintiendo mis piernas temblar, me subo al auto y lo único que hago es llorar, llorar por la noticia, yo solo iba hacer mi control anual, nada me hacía pensar o imaginar que ese día me darían un balde de agua fría.Desde ese día solo lloré, no podía comer ni dormir, ya que mi angustia y dolor era tan grande. Y el dolor y sufrimiento causados a mi pareja, Ivo al igual que yo siempre planeo ser padre, y lo que sería ese proceso. Y de un momento a otro nos lo quitaronEl día viernes 23 de abril, me presentó a la consulta con J. Avilés, pero en el mesón me refieren que se suspendieron todas las horas de el. Le explico a la persona que me atendió, mi angustia y dolor por lo que habla don el Dr. O. para que revise mis exámenes.Cabe señalar, que soy hija única y mi madre como madre sobreprotectora, me acompaña ese día a mi control, ya que no quería dejarme ningún momento a solas, ya que lo único que hacía por esos días era llorar. Al ingresar con él no deja ingresar a mi mamá por protocolo COVID y yo tenía 30 años, “por lo que podía ingresar sola”, lo cual lo entendí pero no lo compartí por la situación que estaba viviendo. Al ingresar le comentó lo vivido días anteriores, y comenzó a llorar. El revisa mis exámenes y me dice que es mejor que espere a J. A. y que tome la decisión con él, pero que existe una alta probabilidad de histerectomía.Así que salgo de la consulta y le digo a mi madre, que es lo mismo, que no podré ser madre, que no podremos cumplir el sueño de ser padres.Vuelvo a pedir hora con J. A. para el lunes 26 de abril, ya que era la única hora que tenía disponible y nadie me reagendo mi cita.En esta oportunidad fui con mi pareja, en la entrada el guardia que toma la temperatura me plantea que Ivo no puede ingresar, por lo que le explicó lo difícil de esos días, que no me quieren dejar sola porque había presentado un cuadro de angustia severa y que me estaba desmayando por estrés, por lo que me dice que me puede acompañar en la sala de espera, porque había poca gente, pero debía preguntarle al ginecólogo si me dejaba ingresar a la consulta en su compañía, ya que solo él podía tomar esa decisión.Ese día me costaba hablar y caminar, ya que llevaba más de una semana sin comer bien y sin dormir. Por lo que cuando me llama el doctor, Ivo me acompaña a lo que el doctor le dice que no puede ingresar. Es ahí donde le comentó lo dicho por el guardia, el doctor después de lo que yo le expuse se ofusca diciendo que pedirá que al guardia lo expulsen de su puesto porque eso no es una decisión de él, quien ingresa y quién no, que son protocolos de la clínica. Y yo mientras escuchaba su enojo por lo sucedido, lo único que podía pensar era que ese guardia fue el único que tuvo empatía conmigo, que fue el único que se preocupó de mi salud mental, porque el doctor me dio todas las opciones que tenía mientras yo solo lloraba, siendo objetiva ¿ustedes creen que escuche algo de lo que me dijo? ¿Creen que hubiera sido mejor que mi pareja estuviera? Porque al menos él estaría más atento a lo que nos estaban diciendo, si esto nos atribuye a los dos, los dos estábamos perdiendo la posibilidad de ser padres, y el doctor por un protocolo COVID, el cual entiendo y comparto, pero por humanidad y empatía siempre podemos hacer excepciones, y considero que esta era una.Lo único que recuerdo que me entregó la orden para ponerme unas inyecciones que permitía que se suspendiera mi periodo menstrual y que el mioma se secara y en tres meses nos viéramos. Me sentí tan abrumada que le pregunté cuál era la probabilidad real de que el tratamiento me permitiera ser madre, y me habló de un 20% que funcionara y un 80% que no. Entonces, seguía igual que antes, la opción viable era la histerectomía y olvidarnos de la idea de ser padres.Dentro de todo lo que estamos viviendo, mi madre me solicita que vea otra opinión, que vuelva a atenderme con Rogelio González. Fue tanta su insistencia que me dirijo a la Clínica Las Condes para visitarlo. Le comento todo lo sucedido, le muestro los exámenes y me ingresar de manera urgente a realizar otra ecografía, debido a que en esa ecografía, tomada por H. el 20 de abril, se observa un coágulo de sangre que se desprendía de mi mioma, y yo pensaba otra cosa nueva, otra cosa que los médicos de la Clínica Bupa no se dieron cuenta. En ese momento me explica que si el coágulo sigue ahí, debo ingresar de urgencia al pabellón por posible septicemias. Y yo solo le decía que debía esperar 3 meses para que funcionara la inyección que me dio el doctor Avilés. Y me tomó de los brazos, tomó la mano de mi pareja y nos dice “chicos si está el coágulo, te estamos poniendo el riesgo, y puedes perder más que el útero”.Al hacernos la ecografía nos dice que no está el coágulo y que el mioma se encuentra más pequeño de lo que sale en la ecografía y que solo eran 3 miomas, y no 4 como salía en la otra ecografía. Y que podemos agendar una miomectomía laparoscópica para fines de mes, y que mi útero podría estar en óptimas condiciones de gestar en 6 meses.Como era una opinión totalmente distinta, decidimos ir a la Clínica UC y vernos con otro doctor que nos plantea lo mismo, que con una miomectomía era suficiente, que era una locura sacarme el útero por mi edad y porque son solo 3 miomas, donde solo uno se encuentra la mitad dentro del útero.Como mencioné anteriormente, mi objetivo es que este tipo de “error”, y lo pongo entre comillas, porque si yo me hubiera seguido atendiendo en su clínica hubiera puesto en riesgo mi vida, mi salud física y mi salud mental, ya que me hubieran hecho la histerectomía 6 meses después y me hubiera arrebatado la posibilidad de ser madre. Por tanto no quiero que este dolor, sufrimiento y poco tacto que tuvieron hacia mi familia se vuelva a repetir con otra.
Objetivo:
Dar a conocer mi experiencia
Que no se repita
Autor: S.F.