Mala atención en urgencias

El día D. 31/08/2014 llevamos a mi bebé de seis meses a la urgencia de la reclamos.cl/empresa/cl_nica_re_aca">Clínica Reñaca debido a una dificultad respiratoria. Lo atendió el pediatra José L. Ramírez quien sólo se dedicó a "revisarlo" y no solicitó ningún tipo de examen para evaluar su situación. a pesar de describirle los síntomas que presentaba él parecía no prestar atención además había que decirle lo que debía hacer ej: le va a revisar los oídos? tiene la garganta inflamada? incluso me dijo que él bebé está bien y parece "que quería salir a pasear" Le diagnosticó espasmo faringeo y rinofaringitis aguda, recetándole Idon y Rinomex nótese a un bebé de seis meses!!! Nos fuimos bastante disconformes con la atención ya que mi bebé seguía con complicaciones.. El día martes lo llevamos a la misma clínica esta vez, con la pediatra Muriel C. quien lo revisó exhaustivamente y solicitó inmediatamente exámenes para confirmar su diagnóstico (radiografía de torax y test pack de enfermedades respiratorias) Luego de ello, le diagnosticó Virus Sincicial y Neumonia Viral y solicitó su inmediata hospitalización. gracias a la excelente atención de la doctora Muriel mi hijo pudo ser dado de alta el día Viernes. Ojalá hubiesen más profesionales como ella que además de ser una doctora de primer nivel posee una gran calidad humana, estuvo todo el tiempo muy pendiente de mi bebé, de los avances del tratamiento y de tranquilizarnos a nosotros. Su atención fue muy certeza y prolija. La atención de mi bebé una vez hospitalizado fue excelente. Si en la urgencia lo hubiese atendido un buen profesional hubiésemos evitado que la situación de mi hijo se complicara y derivara en la hospitalización. Este tipo de profesionales (José L. Ramírez) no es el que uno espera atienda en una Clínica privada y de primer nivel. Siempre hemos tenido una muy buena impresión de la Clínica y éste doctor la ha afectado. Sean cuidadosos y cuando vayan a esta clínica cerciórense que quien los atienda no sea José L. Ramírez ya que es un doctor desprolijo, de pésima calidad profesional y trato indiferente que en lugar de ayudar, pone en peligro la salud de sus hijos, diagnosticando erróneamente y no escuchando los comentarios que manifiestan los padres sobre los síntomas que presentan sus hijos quizás si hubiese puesto más atención lo podría haber diagnosticado correctamente.