- Peñalolén, Chile
- 06, Mayo 2020
- Número: 668459
Rescindir contrato y devolución de dinero debido a errores sistemáticos de la empresa
PRESENTE
El año pasado contraté un servicio de Personal Trainer para ser usado en abril de este año, el cual sería pagado a través de mi tarjeta de crédito, desde el mes de septiembre del 2019. Eso fue acordado así con el gerente del local (Plaza Egaña) y consta en un mail de respaldo que él me envío. sin embargo, desde el año pasado (septiembre-octubre) la empresa tuvo una seguidilla de errores con mis pagos, generándome molestias debido a las gestiones adicionales que debía realizar para aclarar errores que ellos cometían. Pasó por ejemplo, que me avisaron que tenía una cuota atrasada y yo, a sugerencia del jefe del local, pagué la cuota con tarjeta de débito. Al mes siguiente, desconociendo mi pago anterior, me cobraron dos cuotas juntas. Informé al encargado para que al siguiente mes no me cobraran y a pesar de todos mis avisos, me cobraron igual. Es decir, a 4 meses de inicio del pago yo había pagado 5 cuotas. cada vez que me comunicaba por mail con los encargados, no me contestaban y debía ir a la oficina con todos los documentos que respaldaban mis pagos. Finalmente, en el mes de enero no me cobraron, lo que era justo pues con eso se equiparaba la cantidad de cuotas que yo había pagado. El mes siguiente, febrero, sí debían cobrarme pero por error de ellos no cargaron ese cobro. Siendo honesta y responsable, avisé al encargado de local de esta nueva anomalía, pero no me hicieron mayor caso. Todo este asunto me molestó cada vez más pues era evidente que la empresa no contaba con un adecuado orden en relación a los cobros. En ese escenario, y dado que yo aún no usaba ninguna de las clases del Personal Trainer, comuniqué al encargado que deseaba rescindir el contrato y pedía la devolución de mi dinero ($574.000). A fines de febrero o comienzos de marzo, el encargado del local aceptó mi petición, me pidió infinitas disculpas por todos los errores y se comprometió a gestionar mi pedido con sus superiores. cada vez que preguntaba por el avance de las gestiones me decía que lo estaban viendo, que tenían que visarlo los abogados de la empresa, y finalmente dejó de contestarme el teléfono. El asunto estaba detenido, a propósito de la emergencia del covid-19, y sin embargo, ahora me aparece un nuevo cobro de mensualidad, la cual evidentemente, yo no quiero pagar. Si no lo pago contraigo una deuda con mi casa comercial (cosa que jamás ha ocurrido); pero si lo pago, no tengo garantía que el gimnasio me devuelva mi dinero (el cual ya ascendería a $688.800).Yo no estoy devolviendo un producto porque después de usarlo no me gustó, ni tampoco por capricho o irracionalidad. El servicio no ha sido usado (ninguna de las clases) y considero que tengo el derecho a rescindir el contrato debido a que observo malas gestiones de la empresa y esto me ha significado molestia, pérdida de tiempo y estrés. Dado que no he usado el producto, decido volver todo a cero y considero que debo recibir íntegramente todo mi dinero.
Autor: .C.