Pésima atención veterinario municopalidad

Todo parte con la necesidad de esterilizar y poner el chip rastreador a mi perra, una cachorra de no más de un año. No teniendo muy buenos antecedentes (por experiencia propia y de terceros) del procedimiento veterinario y consulta que ofrece la Ilustre municipalidad de Las Condes, decido, por falta de plata, arriesgarme e ir de todas maneras.Acudo al establecimiento y primero se observa la absurda e inoperante cantidad de guardias en el lugar que se dedica a la consulta a los animales. En la parte administrativa, todo muy bien, todo muy claro y con los resguardos precisos, a diferencia de una guardia que se acerca a menos de un metro para exigir la salida de un perro. Esperé un rato y me atienden a la hora establecida, el lugar donde verían a mi perra no es el adecuado, espacio muy abierto, más personas (3) haciendo otros trabajos administrativos, por lo tanto elementos de distracción para el animal y la doctora. Llega el momento y la veterinaria me pide que agarre a mi perra, cachorra por lo tanto inquieta, ella reclama que como llevó a una perra tan loca, transmite una pésima energía lo cual afecta más al animal y a mi, la veterinaria se enoja mas y empieza a quejarse y despotricar. El asunto termina con una pésima experiencia con mi perra en el suelo con lo pierna encima, poniéndole finalmente el rastreador; la incapacidad mórbida de la corporalidad de la veterinaria hace que el trabajo sea más difícil y que tenga nula capacidad de control y empatía hacia el animal.Lo que reclamo finalmente es la falta de un espacio y personal adecuado y DEDICADO al TRATO animal, recalcó que la veterinaria fue una carnicera mórbida. Por otro lado, que la municipalidad disponga este servicio a disposición de los vecinos de manera gratuita no quita que a uno y al animal se le trate dignamente.gracias