- Renca, Chile
- 09, Octubre 2018
- Número: 532973
Mala atención a pacientes postrados
PRESENTE
Mi reclamo es contra la doctora que atiende a los Pacientes Postrados de este consultorio, M. Antúnez, quien a mi parecer, no tiene una vocación por la labor que hace, y no tiene importancia hacia el paciente. N. Roman, mi abuela, estaba siendo atentida como paciente postrado por su patología principal de cáncer pulmonar con metastásis cerebral. El día 10/08 fue dada de alta con ese diágnostico y luego de la establecieran desde el hospital Metropolitano, pues debido a un golpe en la cabeza se activó todo esto, entonces sufrió un aneurisma cerebral. El día 22/08 comenzaron a tratarla en su consultorio por primera vez desde el alta del hospital, y se tramitó la Atención domiciliaria. A su vez, la trataron por una neumonía que presentaba, le dieron antibiotico y la dejaron con kinesioterapia, la cual terminó siendo tratada en domicilio cuando se dio inicio a la Atención como paciente postrado. Por primera vez la fue a "tratar" la doctora que atiende a los Pacientes en su casa (María Antúnez) el día 05/09, y en ese entonces mi abuela presentaba síntomas de hinchazón en las manos, alzas de azúcar más elevadas de lo normal (nosotros sabíamos que le subía y nos lo había advertido la doctora del hospital, debido al corticoides que estaba tomando para mantener desinflamado su cerebro), y además tenía mucho dolor en sus piernas. Ante esto, la "doctora" tratante, responde que son síntomas de su cáncer, que no había nada más que hacer, y que eso lo debía tratar un oncologo (medico que no la había visto a esa fecha porque la biopsia fue tomada el 09/08 y recién el 10/09 la verían los médicos). Desde ese día mi abuela continúo con dolores, altas de azúcar y dolores muy fuertes en las piernas. El sábado 08/09 tuvimos que llamar a la ambulancia porque ella no aguantaba el dolor; le inyectaron un analgésico que hizo efecto unas horas y en la madrugada comenzó nuevamente los dolores y llamaron otra vez la ambulancia, y los paramedicos decidieron llevarla a la urgencia del SAPU para revisar a fondo qué pasaba. Le hicieron exámenes de sangre y se detectó una infección, por lo cual tuvieron que trasladarla a la posta 3, y detectaron que tenía una neumonía que estaba comprometiendo los riñones por la infección. La dejaron hospitalizada en la urgencia a espera de cama y haciendo un tratamiento con antibióticos, el cual además no realizaron bien porque aplicaron algo muy bajo a lo que ella necesitaba (referente a esto interpondré otro reclamo contra la urgencia del hospital SJD). El día martes 11/09, mi abuela es trasladada al hospital SJD, el médico que tomó su caso fue claro en decirnos que en la urgencia dejaban morir a la gente y que a mi abuela no le dieron el tratamiento adecuado, que ellos cambiarían todo, pero en cuestión de horas mi abuela no respondió y falleció ese mismo día debido a una falla multiorgánica, pues por la infección fallaron todos sus sistemas.Observaciones: Si la doctora M. Antúnez se hubiera alarmado de que los síntomas que tenía mi abuela eran propios de una infección, la situación hoy podría ser otra. ¿Cómo es posible que porque un paciente padezca cáncer, una "profesional" se refiera a que todo es por la patología?, es manera de tratar a las personas?, o sea que cuando alguien padece de cáncer, los médicos solo esperan a que muera vinculando todo dolor a esto, sin saber siquiera la etapa en que se encuentra? Si no todos los médicos de la salud pública son así, entonces por qué tienen a este tipo de personas trabajando, "cuidando y atendiendo" a personas que realmente necesitan una buena Atención médica?, de esta forma solo desprestigian más aún la Atención pública. Sé que si hubiésemos contado con los medios económicos para tratar a mi abuela en una entidad privada, no se sanaría del cáncer, pero sí hubiese tenido otra calidad de vida y por supuesto aún estaría con vida. Espero que puedan dar una respuesta, y como mínimo hacer seguimiento a la Atención que presta esta persona a muchos enfermos que seguramente está dejando morir, y de alguna forma no quede en nada la muerte de mi abuela.
Autor: E.C.