- Providencia, Chile
- 21, Enero 2015
- Número: 312112
Atraso en entrega gestión deficiente
PRESENTE
En Abril de 2014 reservé un departamento en Edificio Amundsen Evolución (Luis Amundsen 2170), Inmobiliaria Surmonte el cual tenía fecha de entrega, según lo informado por la inmobiliaria, Agosto 2014. Dados los retrasos en la entrega y el estado de mi departamento realicé un informe (Octubre 2014) sobre las observaciones y detalles que debían ser mejorados y solucionados para la entrega. Por parte de la Gerencia de Venta se me informó que no se realizarían ningún tipo de arreglo mientras no se firmara la escritura y se comenzara con el proceso de Post Venta. Debido a mi apuro por el cambio de casa y asuntos personales firmé la escritura.Mi primera fecha de entrega fue el 9 de Diciembre, además de llegar, el encargado, 2 horas más tarde a la entrega no se habían solucionado ninguno de los temas mencionados. Al día de hoy (21/01/2015) aún no he podido recibir de manera conforme el departamento, de la totalidad de las observaciones mencionadas sólo algunas han sido resueltas, otras de manera deficiente y otras por supuesto nada. El día lunes fue mi tercera entrega y aún siguen habiendo observaciones, me he juntado con todas las personas encargadas. El problema es que se ejecutan los trabajos y no existe ningún proceso de fiscalización ni de visto bueno para la entrega y recepción por parte del propietario. La situación ha llegado a tal nivel que hemos creado un Comité que se ha encargado de conversar este tema no sólo con la Gerencia de Surmonte sino con los socios de la Inmobiliaria.La realidad actual de la mayoría es: propietarios viviendo ahí de manera disconforme porque no tenían otra opción, propietarios que no reciben los departamentos por malas terminaciones pero que ya comenzaron a pagar los respectivos dividendos, prominentes compradores que viendo la situación no han querido firmar escritura mientras el estado de sus departamentos no se solucione por completo.lamentablemente como experiencia de la primera compra de un inmueble, en mi caso, ha sido una experiencia desagradable que de convertirse en un logro y felicidad se ha convertido en malos ratos, disgustos y estrés.
Autor: P.G.