Negligencia

Quisiera denunciar de manera pública a Red Salud por la mala gestión de mi embarazo con preeclamsia que culminó con el fallecimiento de mi bebé prematura de 28 semanas de gestación, falla en el diagnóstico de un médico en particular de esta red y la falta de transmisión de comunicación entre los profesionales del sistema hospitalario de la Clínica Red Salud Santiago. Aunque destaco a algunos profesionales que me ayudaron bastante. Detallaré cada uno de los profesionales que están involucrados. Me atendí durante mi embarazo (hasta las 24 semanas) con el Dr. Valentin T. en el centro de salud de gran avenida en la comuna de San Miguel, quien siempre me manifestó que estaba todo bien con mi embarazo. En la semana número 20 comencé de manera repentina, por la noche, con fuertes dolores en la boca del estómago y con vómitos, razón por la cual fui de urgencia a la clínica Davila, donde de manera muy rápida me hicieron una ecografia que no demostró ningún problema con mi guagua (en ese momento), me hicieron exámenes en los que aparecieron alteradas mi enzimas hepáticas y la presión alta, el dr de turno me comentó que debía volver a hacerme los examenes en 24 horas ya que podría significar "un virus que estaba desarrollando o simplemente algo que me había caído mal al estómago". Me dieron dieta blanda y unos medicamentos para el dolor estomacal Al día siguiente, muy preocupada visito al Dr. Valentin Trujillo, ya que necesitaba conocer la opinión de mi médico tratante respecto a exámenes y a los medicamentos. lamentablemente su agenda estaba llena, así que lo esperé afuera de su oficina para que pudiera resolver mis dudas... Le conté la situación y le mostré los exámenes, ante lo que el me dice "no es nada, es una infección gástrica", me dijo que comiera con dieta blanda y que no había problema con los medicamentos y que no era necesario repetir los exámenes. Hasta entonces me parecía un buen doctor que siempre me resolvió todas las dudas, así que confíe en él. A la semana siguiente me tocaba control con él y los dolores no habían disminuido del todo, así que le comenté "doctor, aún sigo con los dolores" y le comenté que eran espantosos, pasé dos noches enteras sin dormir y vomitaba mucho. El le tomó los latidos del corazón a mi bebé, me tomó la presión, midió el útero y me dijo que estaba todo bien, que siguiera con la dieta. lamentablemente en esta red los ginecólogos no tienen ecografos en sus consultas y uno debe pedir otra hora para realizarsela con otro profesional, y pienso que ese es un error garrafal en embarazos de riesgo como el que yo estaba desarrollando y que requería de manera urgente exámenes y ecografia doppler. En ese momento no lo sabía, así que nuevamente me fié de él... Y me mandó a hacer una ecografia doppler de control pero para la semans 24... Por lo que debía esperar 3 semanas más. Nuevamente, confié en mi médico y me quedé tranquila ya que me dijo que mi bebé estaba bien. Los dolores continuaron y yo pensé que entonces era un problema mío, así que visité de manera urgente al médico general R. Ruiz, a quién le conté toda la historia. A él, quisiera destacarlo porque además de ser muy amoroso y humano, me escuchó atentamente, me revisó y se preocupó de inmediato, por lo que me consiguió un sobrecupo con un gastronterologo al día siguiente: el dr. M. Ojeda, a quién también destaco porque no tenía horas disponibles hasta un mes más y no tardó en atenderme. Una vez en la consulta con el dr. M. O. le conté la historia y lo que me había dicho mi médico tratante... entonces el me dio sucralfato para el dolor (medicamento no dañino para el bebé) y plurianim para mis nauceas. Me dijo que si continuaban me tenían que repetir exámenes específicos. Estos medicamentos quitaron los síntomas por lo que no volví a sentirme mal. Así que hice mi vida normal (trabajar, caminar) Cuando fui a hacerme mi ecografia de la semana 24 en el mismo centro con el dr P. Barrios, el detectó que mis arterias uterinas estaban tapadas, que había poco loquido amniótico y que mi hija no había crecido desde la última ecografia (para esa fecha debía pesar 600 gr y estaba en 320), debido a que se había tapado el traspaso de los nutrientres y por lo tanto no podía orinar y estaba con poco oxigeno, de inmediato me informó que esto era grave y que podría ser "una preeclamsia". Junto a mi pareja muy asustados y angustiados esperamos a que se comunicara con el dr Valentin Trujillo. Nos hizo esperar afuera mientras conversaba por teléfono con él (ya que se encontraba atendiendo en otro lugar ese día). Cuando el dr. P. B. nos va a informar que habló con él, nos volvió a decir que sospechaba de una preeclamsia pero que no podía decirnos que hacer porque eso es decisión del médico tratante y nos advirtió "esto requiere un tratamiento hospitalario, no ambulatorio". Muy angustiados y confundidos pedimos un sobrecupo con el dr Valentin que estaba atendiendo en la Clínica Red Salud Santiago, llorábamos en la sala de espera y llorábamos cuando nos atendió. Él vio el informe de la ecografia doppler y sólo dijo que el panorama estaba mal, que se "había desarrollado algo reciente". Le recordé mis fuertes dolores en la boca del estómago (hace un mes atrás de esa fecha) y el dijo "no, eso era una infección gástrica, esto es otra cosa". Así que me mandó a repetir la ecografia con el dr. R. Ara, quien afortunadamente estaba atendiendo en el mismo lugar, nos dió un sobrecupo y me repitió la doppler... Su opinión fue exactamente la misma que la del dr. P. Barrios, nos dijo "esto está muy grave, podría ser preeclamsia, así que le informaré a su médico y vayan a mostrarle el exámen". Eso fue lo que hicimos, el dr T. revisó la nueva ecografia y dijo "el panorama es el mismo, vamos a tener que hacer exámenes porque podría ser una genopatia", ante eso agregó que yo no estaba en peligro, sino que era mi bebé. Nos derivó al equipo perinatal de la misma Clínica y dijo "ellos cuando se junten los van a llamar y les van a decir qué tipo de examen les pueden hacer".Llegamos llenos de sufrimiento a nuestra casa, al día siguiente pedimos una segunda opinion porque no nos quedamos satisfechos con la opinión de Valentin (ya que los otros dos médicos habían coincidido, menos él), nos consiguieron una hora en la clínica las Condes con el dr M. Montoya, quien muy amable me atendió debido a la urgencia del caso y de manera inmediata me aseguró que yo estaba con una preeclamsia y que mi vida estaba en riesgo, que yo debía estar hospitalizada con reposo absoluto. Revisó todos mis exámenes y dijo "cómo es posible que el médico no detectara que tus enzimas aparecen alteradisimas". Me informó que mis síntomas y ese examen indicaban un "síndrome de hellp", síntoma de preeclamsia, en el que se altera el hígado y que pone de manera inmediata en riesgo la vida de la madre y el bebé. Me mandó a hospitalizar y me dijo que como mi guagua era muy pequeña no podían hacer nada por ella, por lo que me tenían que interrumpir el embarazo en 48 hrs como máximo o sino mi vida estaba en alto riesgo. Destruidos, por sistema ges nos derivaron nuevamente a la Clínica Red salud santiago, lamentablemente la clínica las condes era carisma el dr nos había dicho que no había nada que pudieran hacer para salvar a mi hija con el peso que tenía porque no había implementos tan pequeñoa para conectarla. Llegamos a la Clínica red salud, en donde un médico de urgencia me dijo lo mismo: ¡cómo es posible que no te hayan mandado a hospitalizar!Yo estaba completamente destruida como sólo una madre que va a perder a su bebé puede estar. me hicieron los exámenes correspondientes que arrojaron una "preeclamsia moderada", lo que quería decir que podíamos esperar a que mi bebé creciera (al menos 500 grs para que pudieran salvarla), pero si mis presiones subian debían interrumpir de manera inmediata el embarazo. Me mantuve hospitalizada 20 días, en reposo absoluto... En los que mi guagua pudo crecer a 430 grs, sólo con el reposo ya que no podían darme ningún medicamento. Es decir, si el dr Valentin T. se hubiese preocupado de hacerme los exámenes correspondientes un mes antes, podría haber hecho reposo absoluto desde mucho antes para que mi bebé creciera mucho más. Los 20 días hospitalizada fueron terribles, pudimos ver muchas fallas de comunicación en esa clínica. El primer día (luego de pasar por la urgencia) no fue ningún médico a visitarme ni a darme explicaciones de lo que iba a pasar con mi bebé. Les pedí muchas veces a las tens y matronas que por favor me dieran alguna información, ante lo que nadie supo responder. Hasta que una tens muy amorosa me escuchó, me vió llorar angustiadisima y me ayudó a ir a buscar a un médico que estaba en urgencia. Segundo día de hospitalización, en la noche recién supimos el diagnóstico. Al tercer día llegaron médicos del equipo perinatal, entre ellos el dr R. Ara quien tomó mi caso, fue realmente humano, acertivo con el diagnostico y honesto. Él me comentó que me había estado buscando pero que en maternidad le habían dicho que yo no estaba, algo había pasado con un enfermero jefe que se había ido de vacaciones y tuvieron problemas con el traspaso se información. pésima forma de llevar a cabo la información en maternidad de esa clínica!!! Les contábamos a los médicos todo lo sucedido con Valentin y notabamos como desaprobaban su actuar, pero nunca fueron capaces de decirnos de manera directa que se había equivocado, lo defendían con palabras rebuscadas y de manera inmediata nos cambiaban el tema. Valentin T. no se apareció hasta 5 días después de mis hospitalización, momento en el que junto a mi pareja le manifestamos nuestro malestar y decepción hacia él, porque no escuchó a los dos médicos que le advirtieron de preeclamsia ni tomó las precauciones con los exámenes correspondientes. El se defendió diciendo "que no era el culpable de lo que estaba pasando", a lo que le respondimos que no lo culpabamos de la enfermedad pero si de su tramitación y falla en el diagnóstico por tanto tiempo, le volví a decir que llevaba un mes con síntomas de preeclamsia (lo primero que se altera son las enzimas hepáticas) a lo que el volvió a decir "una infección gástrica no tiene nada que ver con esto". Mi pareja, enfurecido le dijo de manera directa "no le creo", ante lo cual el dr, sin decir nada abandonó la habitación sin siquiera tener un gesto de humildad y reconocer su error. Pedimos que lo sacaran como médico tratante y el dr. R. Ara se hizo cargo de mis ecografias semana por medio y me visitaba todos los días para saber como estaba. El panorama era esperar todo lo que se pudiera para que mi bebé creciera y pudiera estar al alcance de los pediatras... (mientras mi preeclamsia se mantuviera moderada). El día 20 de J. del 2019 mi bebé estaba con bradicardia, el dr Ara me hizo una cesárea de urgencia y se portó muy contenedor conmigo, mi pareja no alcanzó a llegar debido a la urgencia. Le pidió al dr V. (ginecólogo perinatologo experto en embarazos de riesgo) si se podía hacer cargo, ante lo que respondió que no. R. Ara, muy eticamente dejó el trabajo que tenía y se hizo cargo de la operación... Mi bebé nació con 430 grs y el neotalogo pudo reanimarla. Ese día fue lleno de miedo pero a la vez de esperanza porque mi hija pudo estar al alcance de los pediatras. Ante esto el neonatologo Subercaseaux fue excelente e hizo todo lo posible para cuidar a mi hija en sus primeras horas de vida. lamentablemente mi presión se elevó en exceso, por lo que me inyectaron un medicamento y no podía pararme en 24 hrs (debido al riesgo de un paro respiratorio). Así que no pude ver a mi hija en esas horas. Una vez pasadas las horas pedí que me llevaran a verla, era día D. y una matrona de turno (lamentablemente no recuerdo su nombre) me dijo que había que esperar al médico, yo le pregunté si acaso iba a ir un día D. y me dijo "no se po... Qué fue lo que te dijo a ti?" y yo le conteste que después de la operación no me dijo nada, S. que salió a hablar con mi familia. Ella me respondió que lo iba a llamar, lo cual nunca pasó... Pedí 3 veces que porfavor me llevaran a ver a mi hija, que ella me necesitaba, y la respuesta era la misma "hay que esperar la orden del médico", a las 26 horas no pude más de angustia, llamé a un profesional, llegó una tens y le dije "estoy S. que el dr no va. A venir, por favor necesito ver a mi bebé". Ella me respondió que la matrona estaba en colación, que no podían hacer nada, así que la teníamos que esperar. Fueron horas muy angustiantes, los profesionales eran incapaces de hacer algo sin orden del médico e incapaces de llamarlo para asegurarse. Finalmente a las 27 horas a mi bebé le dió una hemorragia pulmonal, me fueron a buscar "urgente" (sin importarles la orden del médico), mi bebé estaba muriendo, llegué a Neonatología y había otro neotalogo (no recuerdo el nombre), quien nos contó que la estaban reanimando. Nos pusieron un biombo en su incubadora y esperamos llenos de angustia... Mi bebé murió y no me dejaron verla. Pasaron 3 horas en los que pude haber estado con ella (ya que se había acabado el medicamento) y no pude por culpa de una matrona que me hizo esperar a un médico que nunca iba a llegar y que luego se fue tranquilamente a colación. Me parece profundamente inhumano separar a una madre de su hija prematura recién nacida, mi guagua me necesitaba para poder sobrevivir y a nadie de esa maternidad de importó, no toman decisiones sin la orden del médico. Yo, desgarrada reclamé entre lágrimas esto al neonatologo, quien sorprendido y angustiado me dijo que el no sabia nada de eso... Que el jamás me hubiese negado ver a mi bebé. Otra vez la falta de comunicación entre los profesionales fue el gran problema. Finalmente quisiera reclamar la falta de "tino" que se tiene ante la muerte de una bebé, nos dejaron estar con ella un rato, pero en la misma sala donde estaban los otros padres con sus guaguas en sus incubadoras, escenas desgarradoras! Porque mientras yo conocía a mi bebé muerta y la cargamos en brazo (mi pareja afortunadamente pudo estar con ella durante su hospitalizacion), teníamos que estar junto a los otros padres. Cero privacidad, cero empatía con ese gran doloe en el qie necesitabamos por lo menos estar en alguna sala solos para poder asimilar y poder estar con ella el tiempo necesario. Pero no fue así, nos permitieron estar con ella un tiempo limitado, llegó una tens a decirnos "me la tengo que llevar"... Como se está en un momento tan extremo y vulnerable hicimos lo que nos decian. Luego me subieron a la pieza, donde me dijeron que el dr Ara no iba a ir... Algo que ya sabíamos, pero que no eran capaces de confirmarnos. En definitiva, viví una experiencia sumamente traumante en este sistema de red salud donde todo es lento, donde el traspaso de información es pobre y en algunos momentos con profesionales poco empaticos. Rescato y agradezco a los neotalogos y al dr R. Ara, quien hizo todo lo posible por salvar a mi bebé y por mantenerme tranquila a pesar de siempre informarme la gravedad del caso. La única razón por la que no me sigo atendiendl con él es porque no volvería a tratar algo tan delicado en esta red.Repudio absolutamente el actual de Valentin Trujillo, ya que me enteré, un mes más tarde que tuvo negligencias similarea con dos pacientes más, una de ellas también terminó con el fallecimiento de un bebé. ¡Este médico no puede seguir ejerciendo! No se atiendan con él y si ya lo hacen cambienlo de manera inmediata.