Este reclamo tiene más de seis meses de antigüedad
  • Puerto Montt, Chile
  • 15, Abril 2021
  • Número: 786668

Clínica De Ortodoncia Lingual Ola Apoquindo

No se deje engañar por estos **********s

SEÑORES clínica de ortodoncia lingual ola apoquindo

PRESENTE


Estimados:Por medio de la presente, quisiera dar a conocer mi caso con la Clínica de Ortodoncia Lingual Ola Apoquindo, ubicada en Av. Apoquindo #6410, Las Condes, liderada por el ortodoncista C. San M. Sánchez.En mayo de 2019 me realicé un presupuesto con dicha clínica. En éste se especifica los gastos de un año de tratamiento. En su comienzo, me dijeron (solo de manera verbal) que mi tratamiento tendría una duración máxima de dos años. En junio del mismo año me instalaron los brackets y a partir de J. de 2019 tuve mi primer control.Al principio me asignaron al ortodoncista de nombre M. Hurtado, con el cual tuve solo tres controles. De hecho, él se encargó de ponerme dos microimplantes que estaban asignados al tratamiento, pero al momento de instalarlos me generó tanto dolor que al avisarle, siguió forcejeando. Inmediatamente puse un reclamo por escrito a la clínica para dejar en evidencia el trabajo que venía realizando. Envié un correo electrónico el 11 de septiembre a la encargada y socia de C. San Martín. I. Gómez: “Estoy bastante desconforme con lo que ha sido su trabajo, primero porque nunca lo he visto interesado en mi tratamiento. Las tres veces que he ido a control con él, solo me ha atendido los primero 3 minutos, le ha dado instrucciones rápidas a un dentista y luego se va. Nunca ha regresado a corroborar si al dentista que le dio las indicaciones hizo exactamente él le solicitó”. Éste es un extracto que tengo del correo enviado en dicha fecha. En ese momento, I. G. me contactó por medio de un llamado telefónico, pidiendo disculpas y me asignó un nuevo ortodoncista. Pero no dejó nada por escrito. Se me asignó a C. San M. (dueño de la clínica). Las malas prácticas continuaron, cada vez que iba me atendía una persona distinta. El modo de trabajo en la clínica Ola Apoquindo es el siguiente: C. San M. se va a una sala con computador (con ventanales, tipo pecera) ahí adentro entran varias personas quienes miran el computador (es una tipo clase express), luego llega San M. con uno de ellos a donde está el paciente y lo único que dice San M. es: "a ver, abre la boca, ciérrala", luego le da instrucciones a la persona de turno y se va. Nunca ha vuelto a corroborar si el trabajo asignado está correcto. En junio de 2020 y viendo que al año de mi tratamiento no tenía el más mínimo cambio y notando que el trabajo de los dentistas de turno eran deficientes, volví a poner un reclamo directo a la clínica. El cual dejo un extracto del correo enviado a continuación: “…llevo casi un año con la ortodoncia lingual y no he tenido ni un cambio. Un proceso que ustedes mismo lo 'venden' como rápido, en mí no ha tenido ese efecto. Por otro lado, tengo instalado eso microimplantes que nunca los han activado, los tengo hace meses y la idea era usarlos para cerrar los espacios, por algo me los incluyeron al presupuesto. Pero ahora San M. me dice que mi solución para cerrar los espacios es poner implantes. Hecho que me incrementa el valor de mi tratamiento. Y que si no lo hago, me tardaría dos años y medio más (o sea, 3 años y medio en total), tiempo que jamás me lo mencionaron al comienzo.De hecho, solo me dijeron que mi caso duraría dos años. Pero ya llevo casi un año y nada. Cero resultados. Ahora tengo las dos paletas super separadas, la mordida más pronunciada que nunca, un arco cortado y "sobrepuesto", dos microimplantes que nunca se han activado, un presupuesto de implantes altísimo y un tiempo de duración extendido, si no tomo la opción de los implantes”.También quiero dejar en evidencia que ninguno de los dentistas que trabajan en la clínica Ola Apoquindo tienen especialidad, hice una búsqueda en Registro Nacional de Prestadores Individuales de Salud (RPNI) de la Superintenencia de Salud y ninguno tiene la especialidad de ortodoncia. Lo que me llama la atención es que una "Clínica de Ortodoncia", según su propio nombre, no tenga un equipo de ortodoncista que atiendan a sus pacientes. En el mismo contexto de no tener las especialidades, en marzo de 2020 me solicitaron en la clínica debía ver una especialista en Periodoncia, allí me atendió M. Hald, quien en el presupuesto generado dice tener la especialidad, pero al buscarla por el registro veo que solo cumple con ser cirujano dentista y no posee dicha especialidad.En octubre de 2020 comenzaba la renovación del presupuesto, el cual nunca me lo conversó C. San Martín, nunca me habló de cuánto tiempo más tenía que estar con los frenillos, de hecho fue la secretaria quien me generó un presupuesto a su criterio por 6 meses, escrito en un papel (tengo todas las evidencias). Siempre van extendiendo los tratamientos de 6 en 6 meses. Nunca menos. En la sesión de noviembre, hablé personalmente con C. San M. diciéndole todo lo desgastante que ha sido el tratamiento con Ola Apoquindo sin ver ningún resultado, de hecho, me llevó a hablar a una oficina a puertas cerradas, prometiendo que en los próximo 6 meses vería los resultados. En siguiente sesión les dije que sólo les pagaría la mitad de la extensión del tratamiento porque no venía ningún resultado. I. Gómez, la Gerenta de la Clínica me llevó a una oficina, cerró la puerta y me dijo: "si no pagas el resto te vas". Yo para ir a la clínica Ola Apoquindo tengo que: pedir un día administrativo en el trabajo, porque vivo y trabajo en la ciudad de Puerto Montt. Tomar un avión o a veces tomar un bus de 12 horas de viaje y luego regresarme a Puerto Montt. Me sentí tan presionada y con tanta impotencia, que terminé pagando lo que restaba a la extensión de 6 meses.Dentro de los últimos meses y al ponerme a investigar me di cuenta que esto le ha sucedido a muchas otras personas. Actualmente hay un grupo en Facebook de personas que han pasado por lo mismo y están buscando la instancia de generar una demanda colectiva a la clínica.En mi caso no solo no vi resultado, sino que además he tenido permanente dolor (durante estos casi dos años) con el tratamiento en general y con los microimplantes que llevo puesto y he hecho una inversión de más de 3 millones de pesos (sin contar las innumerables radiografías que solicitan cada vez que uno va y que no incluyen en el presupuesto).En marzo solicité mi ficha clínica y me respondió la abogada de la clínica Ola Apoquindo diciendo que tenía que ir personalmente a buscarla. Personalmente desde Puerto Montt. Fui a buscarla a S. y lo que me entregaron fue básicamente unas fotos y las mismas radiografías que yo había pagado. Nada del supuesto plan de tratamiento que llevaba con ellos.Con esto fui a otro ortodoncista para ver qué había sucedido en este periodo que llevaba los frenillos linguales y el especialista me dijo que había tenido un retroceso importante, que me habían generado mucho daño en mi boca, que estaba peor que el día 1 que me instalé los frenillos linguales, ya que al no ser especialistas de ortodoncia quienes generan el control mensual, no hacen el trabajo de manera correcta. Tengo las radiografías que lo demuestran.Actualmente tengo una denuncia en el sernac, una denuncia en la superintendencia de Salud y además expuse mi caso en la Sociedad de Ortodoncia de Chile. Les quiero trasmitir que la clínica de ortodoncia lingual Ola Apoquindo lo que hace con sus pacientes es improvisar, no hay un plan de trabajo, no hay especialista que generen los controles y además hay una rotación importante de dentistas todos recién egresados que no tiene ninguna experiencia en ortodoncia.Lo comprobé en los casi dos años que estuve con estos **********s .
Objetivo: Dar a conocer mi experiencia que dejen de engañar a sus pacientes
Autor: K.A.
Publicado el Jueves, Abril 15, 2021 - 12:13. El autor de este contenido se ha identificado privadamente con su nombre, rut y otros datos aportados voluntariamente. Para tomar contacto con el autor considere las alternativas están a disposición. Las opiniones publicadas por los usuarios en el foro no reflejan necesariamente la opinión de los administradores.