Vulneracion grave de derechos a bordo

Soy L. Hernández Saavedra, RUT 11.566.xxx-x, funcionario de la salud, vivo en la localidad de Copihue, comuna de Retiro, y me desempeño en un CESFAM de la ciudad de Linares, por lo que he viajado casi 30 años. Generalmente cuando regreso a casa, lo hago en el Servicio de Buses Interbus, con salida de Linares a las 17:30 Hrs, con destino a Cauquenes y/o Curanipe. En ese horario, desde hace tiempo, se ha tornado habitual, que sube un apodado y conocido como “El Peineta”, para regresar a la ciudad de Parral. Sube al bus, pasado a trago, en ocasiones consumiendo cerveza, y es muy probable que también bajos los efectos de algún tipo de sustancia, vocifera vendiendo chucherías, esparciendo gotas de saliva, o asumiendo, sin serlo, el rol de auxiliar, ya que los conductores se lo permiten. Todo esto altera la tranquilidad, y disminuye la calidad de servicio que como pasajeros nos merecemos, sobre todo cuando venimos de regreso a nuestros hogares luego de una extenuante jornada de trabajo. En resumen, la presencia de este personaje es asediarte, invasiva, y cada vez se torna más desagradable su presencia, porque reitero es un pasajero, pero hace las veces de tripulante., y la gran mayoría de los pasajeros debemos tolerar y soportar día a día que su presencia altere la tranquilidad de nuestro regreso a casa.El día lunes 12 de febrero de 2024, cuando venía ojos cerrado tratando de descansar, a unos 5 Kms de mi bajada en la localidad de Copihue, tomo mi brazo y me dice en su peculiar alto tono de voz: “papi, papi, Copihue”, o la cual yo le respondo, “tranquilo hombre, si yo sé dónde tengo que bajar”, lo cual provocó su ira y descontrol, y empezó a decirme “no te metais ‘na conmigo”. Yo le ignoré, y por cierto cuando ya estaba próximo a la bajada, me paré y me acerque a la cabina, donde él se encontraba haciendo las veces de auxiliar, y nuevamente me empieza con alzado tono de voz, y con acento propio del ámbito delictual, “no te metais ‘na conmigo, eso no más te voi a decirte”, “a mí no me importa ´na si que seai carabinero o seai rati”, mientras se movía haciendo ademanes de querer pelear. Se bajo del bus antes que yo, brincando, mientras continuaba diciendo “no te metais ´na conmigo, porque yo tengo varios hermanos y te podimos pillarte en la calle”, “´pa que sepái”. Yo me detuve, sin bajar del bus, miré al conductor, pero el conductor que es quien está cargo de la máquina, y por ende de la seguridad de cada uno de sus pasajeros, se quedó en una actitud pasiva, no dijo absolutamente, mientras el famoso peineta me esperaba abajo insultando, saltando y brincando, provocando para ver si yo reaccionaba. Yo bajé del bus, ya no le dije nada, pero él subía al bus y volvía a bajar, repitiendo el mismo discurso, tratando de interponerse en mi camino, rozando mis brazos, provocando para ver si yo reaccionaba, seguramente con intención de formar riña. Yo me mantuve sin decirle nada ni reaccionar, igual con temor que me agrediera. Esto ocurrió cuando eran las 18:30 Hrs, aproximadamente, en la P. del cruce Copihue.Llegué a casa, le conté a mi familia. Con un A. conseguí su nombre: H. A. G. RIOS, con varios antecedentes y causas policiales, y también años de presidio en centro de cumplimiento penitenciario.Acudí a un cuartel de PDI de la ciudad de Parral, para solicitar orientación acerca de qué podía hacer luego de lo corrido. Allí el funcionario de turno me refirió, que a “el Peineta” le conocen ampliamente, por sus múltiples detenciones y amplio prontuario delincuencial. En PDI, toman solamente denuncias, lo cual implica embarcarse en todo un proceso judicial, pero se me sugirió realizar constancia en carabineros. Acto seguido, acudí a la Comisaría de carabineros, y allá la sorpresa fue mayor porque la funcionaria que me atendió me refirió que son varios los pasajeros que se han acercado a hacer saber su malestar por la presencia del famoso peineta a bordo del servicio de Interbus con salida de Linares a las 17:30 Hrs, con destino a Cauquenes-Curanipe. Por el tipo de incidente, no se puede dejar sólo constancia del incidente, y francamente hay que hacer la denuncia, e iniciar un proceso judicial con citación a declarar en fiscalía. Al igual que otros muchos pasajeros, desistí de hacer la denuncia, pero por la misma orientación recibida en carabineros, decidí ingresar reclamo al sernac la misma noche del lunes 12-02-2024, por grave vulneración a los derechos de consumidor, cada vez que como pasajero veo amenazada mi tranquilidad y seguridad, por la presencia del famoso peineta a bordo de Interbus, sin que los conductores hagan nada, y aún permitan que este delincuente asuma funciones de auxiliar, e incomode realizando negocio a bordo del bus, sin importar que este vaya lleno. En ese mismo reclamo solicito a la empresa de Buses Interbus, con casa matriz en la cuidad de Talca, que asuma su responsabilidad y tome medidas al respecto, para que sus pasajeros tengamos un viaje cómodo, seguro y tranquilo. Así también les aclaro que si se me presenta otro incidente similar con el famoso peineta a bordo de una máquina Interbus, y además de hacer la denuncia para persecución de la responsabilidad penal del personaje, procederé con la realización de una querella contra la empresa Interbus, por infracción a la Ley del consumidor, porque conocido ampliamente los antecedentes hasta el momento no han realizado nada, y que por favor, se pongan las pilas fiscalizando, y otorgando tranquilidad, paz, y seguridad a sus muchos pasajeros, que día a día le damos vida a su empresa.El día jueves 15-02-2024, agregué los siguientes antecedentes adicionales al reclamo ya ingresado al sernac con fecha 12-02-2024:El día miércoles 14 de febrero tipo 13:00 Hrs aproximadamente, desde el teléfono +56982937384, recibí una llamada de un señor que dijo llamarse Adolfo, y ser secretario de Interbus. La intención de él era recibir mi versión de primera fuente. Con él coincidimos, con que el famoso peineta es un delincuente, un desalmado, y que lo que yo he relatado y descrito en el reclamo ante el sernac, coincide exactamente con lo que los antecedentes que él ha podido recabar con algunos conductores. Al mismo tiempo que me ofreció disculpas por lo ocurrido. La verdad es que las disculpas no sirven de mucho, si no toman medidas serias ante la gravedad del hecho ocurrido.Tampoco quedamos tan de acuerdo es que él como representante de la empresa se escuda en que los conductores tienen temor que el tipo los pueda agredir o les quebré un vidrio. Yo discrepo de esa posición, ya que desde el momento en que los conductores, que son la primera cara visible y representantes de Interbus ante los usuarios que día a día cancelamos nuestro pasaje y le damos vida a su empresa, respecto al “Peineta”: Le admiten subir al bus. No le cobran pasaje. No dicen nada, o hacen vista gorda cada vez que sube pasado a trago, francamente ebrio, bajos los efectos de drogas, o bebe a bordo de la máquina. Vocifere y/o grite a bordo del bus, muchas veces esparciendo gotas de saliva a diestra y siniestra. Le permiten que irrumpa en la nave, como P. por su casa e invada el espacio de cada pasajero, sin pedir permiso, depositando calendarios, linternas o llaveros, a modo de hacer comercio ambulante y obtener dinero a cambio. Le permitan, y no le impidan que asuma el rol de ayudante, o “Pseudo-auxiliar” a bordo, entre el trayecto comprendido entre el paradero ubicado en Espacio Urbano de Linares, y la ciudad de Parral. Le dan cabida para que altere la paz, tranquilidad, comodidad y seguridad de los pasajeros. Le den el espacio de conversación, y a modo de “pseudo-amistad”.Todos los puntos anteriores, constituyen y fijan un actuar sistemático de los conductores, que son funcionarios y primera cara visible de Interbus ante sus usuarios, y por lo tanto involucran directamente a la empresa, y por lo tanto, ésta no puede tratar de eludir responsabilidades civiles ante los organismos pertinentes, incluso penales por las incivilidades que pueda cometer el personaje “Peineta”, a bordo de la máquina.En ese mismo sentido, pero desde una perspectiva distinta, discrepo cuando el secretario de Interbus me dice, “Es que los conductores no se atreven a negarle el permiso, porque tienen temor que les vaya a hacer algo, o les pueda romper algún vidrio. Para eso existen las policías, y su deber es hacer valer es estado de derecho de nuestro país. No pueden ni deben anteponer su seguridad personal, a costa de la seguridad de sus pasajeros ya que ellos además de conducir son responsables de lo que suceda a bordo de la máquina. En ese mismo sentido, yo no concibo que lo que sucede con el personaje a bordo de máquinas de Interbus, pudiese en algún momento, tener espacio en empresas del mismo rubro y de servicios en la misma área geográfica, como son Linatal, Altas Cumbres, Talca Paris y Londres, Nilahue, incluso en Buses Calinpar, que sin ofender, pudiese ser considerada como de menor categoría. Entonces si el “Caso Peineta”, es una situación que no se permite en otras empresas, por qué puede tener espacio en Interbus.Entre todos, debemos ser inflexibles en la lucha contra la delincuencia. En lo personal, la situación ya está en conocimiento tanto de carabineros de chile, como de la Policía de Investigaciones. No descarto, también poner el caso en conocimiento de la Subsecretaría de Transportes y Telecomunicaciones, al mismo tiempo de solicitar fiscalización del servicio en el horario involucrado.Por otra parte, durante la conversación que sostuve con el secretario de Interbus, le solicité que toda esta situación se hiciera llegar a la gerencia de la empresa. En ese sentido, yo por mi parte tomaré todas las acciones necesarias para tener la certeza, que la gerencia, sí se encuentra en conocimiento de lo ocurrido.LUIS H. [email protected]+569 96672168Linares, febrero 16 de 2024.-