Es una demostración de que estamos viviendo en una sociedad de mercado y no de un "MERCADO PARA LA SOCIEDAD " donde el consumidor es una tarjeta plástica que se debe someter y acatar lo que el retail , le imponga.
Nos ofrecen productos que no cumplen con lo publicitado, trucan fotografías, adornan artículos, los cuales no son representación fiel e igual en escala en relación a sus tamaños reales.
Y al realizar los reclamos , ajustados a la Ley, es derivado por una contestadora automática, la cual lo deriva a que digite un sin número de dígitos, lo que al final logran el objetivo del retail ,o cual es CANSAR AL CLIENTE y este como medida de saneamiento mental , se olvida de la compra, ya que sí continúa en esta odisea,terminará con una úlcera estomacal y el retail continuara defraudando a sus clientes ......