Pésima calidad

Compré un departamento del condominio Rosal Oriente (inmobiliaria SIP, empresas Guzman y Larraín) por 4100UF, a los 2 meses de vivir ahí las paredes se llenaron de hongos por la excesiva humedad que pasaba por las ventanas (que ni siquiera tenían instalada felpa), se mojaba toda la pared todas las mañanas, los baños tienen sus techos agrietados, todas las paredes tienen grietas importantes y se les ha caido la pintura a pedazos, el suelo (piso flotante) estaba inflado y crujía constantemente, la cocina tine un granito que queda manchado por semanas cuando le cae agua y peor cuando me cae aceite, las puertas están mal cuadradas y la de acceso principal filtra excesiva luz por todos sus bordes, las puertas de los closets se soltaron y descuadraron, entre otras muchas fallas, para lo que post venta sólo propone arreglar sellando con silicona todo, NO DAN SOLUCIONES REALES, no responden CORREOS NI SE HACEN CARGO DE LOS DESPERFECTOS ESTRUCTURALES DE LOS DEPARTAMENTOS. Para más remate, las cañerías y sistema interno de agua es deficiente y posterior a una rorura externa de matriz se inundaron 3 pisos enteros! Sin ninguna respuesta de la inmobiliaria ni la constructora.