La lucha de David contra Goliat en el mundo de las finanzas parece estar lejos de terminar. Tomemos el caso de Juan, un pequeño empresario que ha estado lidiando con Redelcom, una empresa de servicios financieros, desde diciembre del año pasado.

El problema comenzó cuando Redelcom retuvo todas las ventas de crédito y débito de Juan en diciembre, alegando que Transbank estaba reteniendo el dinero. Aunque el contrato de Juan con Redelcom especifica que Transbank valida las operaciones que se pagan, también dice que una vez que Redelcom descuenta sus comisiones, las ventas se consideran aprobadas. Juan afirma que, aunque Redelcom se ha llevado su parte, no ha visto un centavo de sus ventas.

La situación se complica aún más por la falta de respuesta de Redelcom. Juan ha intentado en repetidas ocasiones contactar con la empresa, tanto a través de su línea de atención al cliente como por correo electrónico, pero sus esfuerzos han sido en vano.

Además, Redelcom ha solicitado más documentación a Juan, a pesar de que todas las operaciones se registran a través de su sistema de boleta electrónica. Juan está en un callejón sin salida, sin saber qué más puede proporcionar para satisfacer a la empresa.

Este caso pone de manifiesto la necesidad de una mayor supervisión y regulación en el sector financiero. Las empresas no pueden tener carta blanca para hacer lo que quieran con las pymes, especialmente cuando se trata de retener fondos sin explicación.

Esperamos que Juan y otros en su situación puedan obtener justicia. Mientras tanto, es vital que todos los empresarios estén al tanto de sus derechos y sepan a qué instancias acudir cuando se enfrenten a situaciones similares. En este caso, Juan ha recurrido al CFM para buscar respuestas, y esperamos que su reclamo sea atendido de manera oportuna y justa.

La lucha de Juan es la lucha de todos los pequeños empresarios que buscan un trato justo en el mundo de las finanzas. Es hora de que las empresas de servicios financieros rindan cuentas por sus acciones y se adhieran a un código de conducta ético y transparente.

Margarita A.I.
Reclamos.cl