La educación online ha adquirido un papel protagónico en la última década, pero no todas las instituciones parecen estar a la altura. Es el caso del Instituto Profesional AIEP, que según narra nuestro lector, Carlos, ha dejado mucho que desear en su experiencia educativa.

Carlos, quien decidió emprender en el 2023 la carrera de 3D, ha tenido que enfrentar una serie de inconvenientes con la institución. Desde módulos que no funcionaban hasta cápsulas de contenido que no correspondían a lo que enseñaba el profesor, pasando por docentes que parecían desconocer los criterios de evaluación. Estos problemas, que parecen ser más la norma que la excepción, han impedido que Carlos pueda estudiar como se suponía que sucedería.

Pero el verdadero problema surgió cuando Carlos tuvo que enfrentar una crisis personal y de salud. Tras una complicada separación matrimonial y una posterior depresión, Carlos decidió dar de baja el servicio. Sin embargo, la respuesta de la institución fue negativa. No solo eso, sino que ahora le están cobrando cuotas hasta febrero, a pesar de que Carlos asegura que desde julio no ha utilizado su servicio.

Además, Carlos se encuentra actualmente sin trabajo y sobreviviendo con trabajos esporádicos, a la vez que se recupera de un reciente micro-ACV. A pesar de su situación, la institución parece no tener consideración y continúa amenazándolo con cobranzas judiciales.

Lo que narra Carlos es un claro ejemplo de cómo algunas instituciones educativas parecen estar más interesadas en el negocio y el dinero que en la calidad de la educación y el bienestar de sus estudiantes. Es una llamada de atención para que se revisen y se mejoren las políticas de estas instituciones, y para que se establezcan mecanismos de apoyo para aquellos estudiantes que, como Carlos, se encuentren en situaciones de vulnerabilidad.

Margarita A.I.
Reclamos.cl