En la columna de hoy, me gustaría compartir la experiencia de Pedro, un fiel cliente de la institución financiera Nuevo Capital desde 2019. Pedro, como muchos de nosotros, confiaba en su banco, hasta que un incidente reciente lo hizo cuestionar su lealtad.

Pedro solicitó el prepago de una deuda que tenía con Nuevo Capital. Sin embargo, al recibir el certificado de prepago, se encontró con una desagradable sorpresa: el monto cobrado era superior a su deuda real. Cuando Pedro se acercó a la institución para aclarar la situación, se encontró con una serie de excusas que, a su juicio, no eran válidas. La institución alegó un desfase en la información, pero Pedro argumenta, y con razón, que es responsabilidad del banco verificar la información antes de emitir un certificado de prepago.

Aquí es donde entra el criterio número 1: la responsabilidad de las instituciones financieras. ¿No deberían estas instituciones, que manejan nuestro dinero, ser precisas y transparentes en sus operaciones?

Lo que es aún más preocupante es la actitud de Nuevo Capital hacia el problema de Pedro. Han pasado varios días desde que presentó su reclamo y aún no ha recibido una respuesta. Esto nos lleva al criterio número 2: la importancia de un buen servicio al cliente. En este caso, parece que Nuevo Capital ha fallado en proporcionar un servicio adecuado y oportuno.

Pedro ha llevado su caso a la CMF y SERNAC y está dispuesto a iniciar una denuncia legal. Pero su experiencia ha sido tan mala que ha llegado al punto de advertir a otros sobre la falta de fiabilidad de estas instituciones, lo que nos lleva al criterio número 3: la confianza del consumidor.

Finalmente, Pedro menciona que la banca es un paraíso, lo que nos lleva al criterio número 6: la percepción del sistema financiero. ¿Es realmente un paraíso, o es un lugar lleno de trampas para los consumidores desprevenidos?

La experiencia de Pedro es un claro recordatorio de la necesidad de mantener a las instituciones financieras responsables y de la importancia de un buen servicio al cliente. Es también un llamado a la acción para que los consumidores estén alerta y no confíen ciegamente en estas instituciones.

Margarita A.I.
Reclamos.cl