- Copiapó, Chile
- 25, Octubre 2015
- Número: 350191
PRESENTE
Mi nombre es Ximena Gutiérrez González, mi reclamo tiene que ver con la atención del Dr. Fraga, puntualmente el día 22 de octubre. Acudí a su consulta por que se rompieron mis anteojos, me acompaña mi hija, la atención en un comienzo fue normal, me entrega la receta para la compra de los nuevos anteojos, y yo le explico que he faltado a mi trabajo, por que sin anteojos me es imposible cumplir con éste, a lo que él responde GRITANDO ¡¡¡ SEÑORA PARA ESTO NO HAY LICENCIA!!!, le digo con calma que él me acaba de evaluar, por tanto tiene clara mi incapacidad visual, que no estoy inventando nada, él me interrumpe groseramente y repite la misma frase ¡¡¡ SEÑORA PARA ESTO NO HAY LICENCIA!!!, esta vez un poco más fuerte, a lo que mi hija le señala que cambie su tono, que le estamos pagando por un servicio , que no nos está haciendo un favor, yo le explico que no es primera vez que se me rompen los anteojos y que la vez pasada me habían dado licencia médica, a lo que él responde irónicamente y totalmente fuera de contexto - ah, así que si a Ud. se le rompen los zapatos va donde un traumatólogo, a pedir Licencia-,y nuevamente su frase ¡¡¡ SEÑORA PARA ESTO NO HAY LICENCIA!!!, que ya era como la quinta vez que la repetía.mi hija y mi esposo, también se iban a atender con él, aprovechando el viaje, pero para entonces cuando el quiso atender a mi hija, preguntándole y Ud. se va atender, mi hija le responde que con él NO, a lo que él toma de forma brusca la receta que ya me había entregado con la intención de romperla, y mi hija se la quita de sus manos. ella le indica que debe bajar su ego, y nos retiramos de su consulta, devolviendo los bonos de mi hija y mi esposo.Escribo este reclamo porque acudí a una prestigiosa clínica como es Megasalud, esperando ser bien atendida, y al final me sentí totalmente vulnerada, debido a que mi incapacidad visual es alta (Adjunto receta del mismo Dr. ), sintiendo y percibiendo la terrible situación vivida, sin siquiera poder ver la cara del Dr., Lo más terrible de la situación es que él, es el único oftalmólogo de la clínica en La Serena
Autor: X.G.