En una era en la que los consumidores tienen más opciones que nunca, la atención al cliente y la satisfacción del cliente son esenciales para el éxito de cualquier negocio. Sin embargo, parece que Toyota Chile aún tiene que aprender esta lección.

Un cliente, llamado Roberto, ha expresado su frustración con la empresa después de experimentar problemas recurrentes con el sistema de frenos de su vehículo, adquirido en febrero de 2023. A pesar de llevar el vehículo al taller en repetidas ocasiones, el problema persiste. Para empeorar las cosas, Roberto afirma que el jefe del taller técnico insistió en que el ruido del freno es "normal", a pesar de que comenzó a menos de tres meses de la compra del vehículo y con menos de 3000 km de uso.

El caso de Roberto es un ejemplo de cómo la Ley 19.496, que establece una garantía legal para los consumidores, a veces se ignora en la práctica. A pesar de sus reiteradas solicitudes para hacer uso de esta garantía, Toyota Chile se ha negado a proporcionar una solución satisfactoria. En lugar de solucionar el problema o devolver el dinero de Roberto, la empresa insiste en que el vehículo debe ser llevado al taller por cuarta vez.

Es aún más alarmante que Guillermo Iturriaga, jefe de taller de Bruno Fritsch en La Florida, haya declarado que la empresa "jamás devuelve el dinero a los consumidores". Este tipo de actitud no solo es contraproducente para la relación con los clientes, sino que también viola los derechos de los consumidores establecidos en la ley.

Es lamentable que empresas como Toyota Chile parezcan estar más interesadas en retener el dinero de los consumidores que en proporcionar un producto de calidad y un servicio al cliente excepcional. Este caso debe servir como un recordatorio de la importancia de los derechos del consumidor y de la necesidad de que las empresas respeten estos derechos en todo momento.

Margarita A.I.
Reclamos.cl