- Maipú, Chile
- 09, Junio 2015
- Número: 330161
Negligencia en atención de urgencia
PRESENTE
El día Lunes 8/06/2015 acudo al servicio de urgencia de la Clínica Davila con sintomatología compatible con infarto, dolor precordial, opresivo irradiado a hombros y mandíbula de mas de 20 min de duración con variación de intensidad, de inicio súbito asociado a disnea, esto acompañado de factores de riesgo cardiovascular evidente, bajo estas circunstancias a la llegada al mesón la administrativa de admisión me aviso que hay un tiempo de espera de 4 horas, y me hace firmar un pagare en blanco por el ingreso para esperar atención,. luego me acerco a hablar con el "Priorizador" quien me indica que tome asiento y que el se acercara a conversar con nosotras, el se acerca y le pregunta a mi mama sobre su motivo de consulta quien le describe lo antes mencionado, a lo que el TENS le indica que hay 4 horas de espera y que mientras tanto debe mantenerse sentada, sin realizar esfuerzos físicos en espera de ser atendida, ante esta increíble situación me acerco a hablar con el priorizador y le indico que mi nombre es Lorena Meriño y soy Enfermera, y le consulto sobre los protocolos que deben aplicarse a los pacientes que consultan por dolor de pecho que coincidan con una descripción compatible con IAM, ya que según la guía GES el paciente debe ser rápidamente evaluado con un ECG de 12 derivaciones para descartar que el dolor sea de origen cardíaco, y que este procedimiento según manejo, le explico, tiene un tiempo máximo de 30 min para el ECG y de 45 para que el ECG sea evaluado por un medico, ante mi pregunto el TENS priorizador solo me dice que no existe protocolo para esas situaciones, que debe esperar y yo le expongo que una persona con esa sintomatología no puede esperar 4 horas y en caso de alguna complicación quien seria responsable de las consecuencias, ante esto la TENS displicentemente me contesta que la clínica debe responsabilice si la paciente se complica, todo esto sin un correspondiente TRIAGE del paciente, entiéndase sin control de signos vitales, y sin una Enfermera que realice la evaluación correspondiente para categorizar al paciente según su gravedad.Ante esta situación insólita y negligente procedo a anular el pagare que ya había firmado en blanco para que mi madre fuera ingresada y me dirijo a otro centro de atención de urgencia para una atención de mayor calidad.
Autor: L.M.