- Maipú, Chile
- 27, Agosto 2019
- Número: 608872
Acoso, mala atención y receta errada
PRESENTE
Hace dos semanas acudí a un supuesto oftalmólogo profesional en Integramédica Barcelona. Llegué a su consulta 15 minutos antes de la hora, para ser atendida 10 minutos después de la hora estipulada (y no tenía pacientes previos). Cuando me atendió, lo primero que me impactó fue su aspecto, mal olor y mala actitud. Me atendió lentamente, sin dejar de mirarme asquerosamente y sin ninguna clase de reparo en que ya estaba atrasado y que yo era una paciente y no un pedazo de carne. Me hizo sentar en la silla para examinarme la vista, pero antes de eso cerró con pestillo. Yo estaba nerviosa y muy asustada. Empezó a examinarme y lo llamaron por teléfono; contestó y habló aproximadamente 3 minutos. En el intertanto, yo estaba pensando en irme de la consulta. Colgó y me empezó a contar una historia personal, de su mala suerte con las compras en retail y mil cosas que a mí no me importaban. Le pedí que por favor me examinara, porque tenía que volver al trabajo. Me hizo los típicos test con las letras y después me dijo (pasándose la lengua por los labios una y otra vez si parar, onda tic): te voy a mirar más de cerca, pero no te pongas nerviosa y haz como si yo no estuviera aquí. Me miró el ojo con una linterna y me dijo: pero agáchate un poco más, tranquila. Yo estaba que me *****a del susto, porque cada vez me ponía más cerca de su cuerpo. Yo quería puro salir corriendo. Aguanté lo que más pude y le dije: perdón pero me tengo que ir. Se salió de encima mío, se fue a su escritorio, revisó las mediciones y me extendió una receta mal hecha, lo que pude verificar hoy al momento de retirar mis anteojos, los que obviamente me quedaron mal y no veo nada. Era tanto su afán por acosarme, que el viejo *****o cochino hizo mal su supuesto trabajo, porque estaba concentrado en seguir acercándose a mí. Hoy, leyendo en Internet, encontré más reclamos que hablan del mal profesional que es este viejo asqueroso. Su nombre es R. Vidal, y ya no debería ejercer más como 'médico', no tan sólo porque no hace el trabajo eficientemente, sino porque es un pervertido, un cerdo intimidante que engaña a la gente.La peor parte. Fui a Integramédica a pedir ayuda para un nueva atención con otro profesional, y al contar la historia, la mina que me atendió se rió y dudó de lo que estaba diciendo, estableciendo que me tenía que atender el mismo doctor o tenía que espera 10 días hábiles para ver qué pasaba con mi caso. Su nombre es Yasna, mujer cero empática y además burlesca. por favor ayúdenme a difundir esto!
Autor: F.L.