Cuba. hotel paradisus. vacaciones del terror

Horrible experiencia que tuve con Cocha, los hoteles y las agencias en Cuba.A principios del 2017 compre un viaje para La Habana y Varadero, confiando en el servicio que Cocha me prestó en dos ocasiones anteriores, para llevar a mi madre a sus primeras Vacaciones fuera del país. Las dos la pasamos pésimo y mi madre terminó enojada conmigo por llevarla a deplorables condiciones y no poder devolverse a Chile antes.Desde el principio todo salió mal. En el aeropuerto de la Habana, una chica de Transporte Gaviota nos indicó que debíamos tomar un número de bus y que en la recepción del Hotel nos esperaría una persona de la agencia para orientarnos. El número de bus resultó que no existía y tuvimos que buscar nuestro bus preguntando a lo cual recibimos de malas ganas indicaciones para llegar al bus y en el cual nunca se disculparon por el error.En el Hotel Habana Tryp nunca llegó la persona de la agencia y ante mi insistencia y por una hora de espera, el Hotel aceptó hacer el check in con los vauchers, pero que debíamos esperar que llegara la chica de la agencia para los tours. Cómo no llegó ese día lunes nos organizamos por nuestra cuenta. Al día siguiente llegó la chica de la agencia a interrumpir el desayuno, saludando sin dar ninguna explicación y esa fue la primera y última vez que la vimos, y tampoco nos ayudó con nada, porque los tours los hicimos por nuestra cuenta.El Hotel de la Habana sabíamos que no tenía muchas estrellas así que no reclamamos por la suciedad del cuarto y la falta de toallas, pero en el Hotel Paradisus donde pagué por 5 estrellas y la tranquilidad de mi madre, fue un caos.Cuando llegamos nos cambiaron arbitrariamente la habitación alegando que nos darían una superior, pero de superior nada. Primero perdieron las maletas, mientras recepción insistía que para ellos nosotras ya teníamos las maletas, tuve que discutir para que las buscarán. Llegaron una hora y media después sin ninguna explicación.La primera habitación del Paradisus estaba realmente sucia con restos de comida incluso, pedimos que una camarera limpiara y nunca llegó. Entre las camas y la tasa del baño había un ventanal en mal estado que nunca cerró y tenía una separación de 10 centímetros, por lo que se podía ver y escuchar desde la cama a menos de 30 centímetros de distancia, si mi madre o yo, orinabamos, y también se compartía el olor del baño.Cómo esperamos mucho tiempo las maletas, no pudimos cambiarnos de ropa y pedimos comida a la habitación, la cual llegó tarde, muy fría y sin ningún aliño. reclamos por el mal estado de la habitación y que una lámpara de noche estaba mala, pero no daban soluciones. Cuando traté de darme un baño, la ducha estaba en mal estado y no funcionaba, sin agua. Después de todo eso, mi madre furiosa conmigo, decidimos tomar las maletas y bajarlas desde un segundo piso por nuestra cuenta y pedimos que nos dieran la habitación original que estaba reservada. Nos respondieron que esa era peor, claramente insistimos igual y nos llevaron a otra habitación sucia, sin toallas, que le faltaba una ampolleta y lo del terror era que la cama estaban usadas (restos de B. púbico en la cama de mi mamá). Cómo nadie nos daba una solución tuvimos que dormir en esas condiciones, escuchando a mi mamá llorar de asco, de la frustración y de la rabia.Cómo estuve en otro país caribeño antes, sabía que si bien hay insectos las habitaciones son fumigadas. La nueva habitación nunca estuvo fumigada a pesar que prometieron hacerlo, y estuvimos peleando con toda clase de insectos.Al otro día, fuimos personalmente a dejar el reclamo, ante lo cual se disculparon y que no podían hacer nada más que insistir con la camarera para que limpiara a fondo. Después nos ofrecieron como compensación unos masajes, ante lo cual nos negamos, y entendimos que nunca comprendieron que el problema era la suciedad con qué hacían todo, no dejaríamos que nos tocaran.El jueves temprano tratamos de salir del Hotel para el pueblito de Varadero, pero no tenían cambio de euros a esa hora. Para evitar pasar tiempo en este sucio lugar y que además, trataban con desgana, de mala forma (a la mayoría de los turistas, no solo a nosotras), y se escuchaba en cada sector que regañaban por "florear" algo así como flojear, decidimos con mi mamá pagar más y tomar tours fuera del Paradisus, para pasar el menor tiempo posible y llegamos sólo a cenar..Los problemas incluso estaban en el bufett, un día teníamos tour y debimos esperar por el agua caliente para un té, porque la máquina no funcionaba y todos debimos esperar un buen rato.Fuimos por fin al pueblito de Varadero y llegamos a almorzar al hotel, como no estaba el bufett abierto, tratamos de pedir unas hamburguesas como snak que se suponía era 24 horas cerca de la piscina. Esperé más de una hora y nunca llegaron, claramente me quedé sin almorzar. Las camareras se peloteaban entre ellas para levantarse y buscar al cocinero que hiciera las hamburguesas, pero no estaba al parecer. Claramente no pagué para pasar hambre y tampoco mi madre.La habitación siempre estuvo sucia, nos hacían la cama con las mismas sábanas, nunca renovaron las toallas y solo un día nos botaron la basura del papelero del baño. Compré en dos ocasiones tarjetas de internet, pero la señal fue tan baja que nunca pude realizar el check in del avión. Tratamos de confirmar que el lunes pasarían a buscarnos a la hora prometida, y nadie nos respondió, el Hotel dijo que lo viéramos con la agencia, pero nunca conocimos a nadie de la agencia en el Hotel Paradisus. Cómo estaba aislada sin internet para comunicarme, sin poder confirmar el vuelo, pedí ayuda y la solución era pagar una llamada a la agencia de viaje, con las tarifas que a ellos le parecían. No accedí a seguir pagando por internet o teléfono.Me dañé el dedo del pie, nada grave, pero pedí un parche curita por la herida, como de costumbre la recepción y atención al cliente dijo que no tenían botiquín, pero si me acercaba a las camareras del sector de niños tenían y me podían pasar alguno a cambio de un "regalito" o sea pagar más euros. Solucioné el tema insistiendo a la doctora que me pasara un parche curita, quien lo entrego diciendo que hacía un favor porque los parche curita eran para curaciones en su oficina, los recibí, pero no dejé propina por el favor.Después de todas las rabias y frustraciones, claramente la relación con mi mamá estaba mala, responsabilizandome en parte por arruinarle sus vacaciones.Por mi parte, considero que no soy responsable por el mal servicio que recibí, el cual no tiene relación con lo que pagué a Cocha.Por mi trabajo veo difícil tomar Vacaciones en un corto tiempo, y considero que enviándome a este lugar han arruinado mi descanso.