- Ñuñoa, Chile
- 15, Septiembre 2021
- Número: 842986
Discriminación y poca flexibilidad
PRESENTE
El día de hoy miércoles 15 de septiembre a las 5:00 de la madrugada fui al aeropuerto con mi perro shithzu de 7 meses, (raza extremadamente tranquila, se encuentra adiestrado y se encontraba impecable, recién salido de la peluquería canina) llevé toda la documentación necesaria para realizar un vuelo con mi perro (certificado del veterinario, certificado del psiquiatra que lo acredita como compañía de soporte emocional, además de otra documentación requerida para mi viaje) fui con un bolso de viaje para mascotas blando que cumplía con el tamaño según lo estipulado en la pagina web LATAM e información telefónica de la compañía para viajar en cabina. El asunto es que según personal de counter mi perro media 3 cm más de lo permitido por lo que no podía ir en cabina, que al estar de pie su lomo levantaba un poco el bolso y según personal eso no le permitiría estar parado bajo el asiento para su comodidad, apelé que el perro se iría acostado y descansando, pues no había dormido las horas correspondientes y que siempre que ha viajado en su bolso va echado y nunca de pie, que el bolso cumplía con las medidas solicitadas en la pagina y que el perro pesaba menos de 7 kg. Que es lo que solicitaban (mi perro pesa 4 kilos) sin embargo, personal de counter insisten en que no podían hacer ninguna excepción por esos 3 cm de diferencia en su altura y que sólo podía ir en bodega, sin embargo, el bolso de viaje no me servía para ir en bodega al ser blando por lo que no tenía más opciones que dejarlo sólo en Santiago o abortar mi vuelo por su inflexibilidad y poca empatía, ya a esa hora no era posible comprar una caja transportadora dura para que al menos pudiera viajar en bodega. Insistí en que era un perro de compañía emocional, con certificación médica y que sólo eran 3 cm de alto la diferencia, que era un perro muy tranquilo y educado y que a esa hora no tenía opciones de comprar una caja dura para ir en bodega, sin embargo, que giraba bien dentro de su bolso y que iría acostado, pero nada fue suficiente. Veo que la normativa interna de LATAM en CHILE es más importante que la LEY nacional de perros asistenciales. Por otra parte consideró discriminatorio la normativa aplicada en Chile ya que en México y colombia los perros asistenciales pueden viajar incluso en el regazo del pasajero hasta el tamaño de un niño menor a 2 años. tuve que pedir que un familiar viniera a buscar a mi perro al aeropuerto y ahora estoy angustiada arriba de su vuelo, lo peor del caso es que bajo el asiento las medidas son superiores a lo que dice la página por lo que mi perro entraba perfectamente de pie si hubiera querido y que era el motivo por el cual no lo dejaron subir. Para sentirme aún más discriminada, vi un perro del mismo tamaño del mío esperando abordar un vuelo dentro del aeropuerto que si lo habían dejado pasar. Son Pésimas las políticas respecto al viaje con mascotas y pésimo servicio al cliente de sus funcionarios, cero empatía y poca flexibilidad a la situación y el horario.
Objetivo:
Obtener una solucion
Mail de Disculpas respectivas por la situación.
Que revisen esta situación con sus funcionarias para que no ocurra otra vez y tengan mejor servicio al cliente, analizando la situación completa (comportamiento y estado del perro, tamaño).
Qué me aseguren si para un próximo viaje requiero llevar caja transportadora dura para ir abajo o me lo recibirán en cabina.
Modificar sus políticas respecto al acompañamiento de perros asistenciales en el avión. Considerando normativas como las que están aplicando en Mexico y Colombia que permiten mayor flexibilidad en cuanto tamaño. Considerando además lo que actualmente significa un perro para un familia normal, cuyo aumento ha sido significativo el último periodo. LATAM no es un aerolínea familiar y menos pet friendly.
Autor: R.F.